Las Juntas Generales se solidarizan con los allegados de «Txiki» por impedirse homenaje
Las Juntas Generales de Guipúzcoa han mostrado hoy su solidaridad con los allegados de Jon Paredes «Txiki», uno de los últimos fusilados en el franquismoSan Sebastián, 4 nov (EFE).-
Las Juntas Generales de Guipúzcoa han mostrado hoy su solidaridad con los allegados de Jon Paredes «Txiki», uno de los últimos fusilados en el franquismo, después de que la Audiencia Nacional prohibiese el homenaje que se le iba a tributar el 27 de septiembre en el municipio guipuzcoano de Zarautz.
Todos los grupos de la cámara, excepto el Partido Popular, han apoyado esta iniciativa presentada inicialmente por Aralar y que se ha transaccionado con el PSE-EE, Hamaikabat, Ezker Batua y Alternatiba.
Las JJGG han solicitado asimismo que las instituciones hagan una «reflexión» para que los familiares y amigos de Paredes «y de otras víctimas» de la dictadura franquista «puedan seguir celebrando con normalidad» este tipo de actos.
El homenaje a este miembro de ETA fusilado, que finalmente se celebró el 25 de octubre, estaba convocado para el 27 de septiembre por la asociación Ahaztuak 1936-1977, que trabaja en el ámbito de la memoria histórica, pero fue prohibido por la Audiencia Nacional, que lo incluyó entre los actos del Gudari Eguna.
En el documento aprobado hoy se reconoce también la labor de esta asociación en la reparación de «los valores de la verdad y la justicia y los crímenes cometidos durante el franquismo».
El portavoz del PP, Íñigo Arcauz, ha explicado que su grupo no ha respaldado esta iniciativa porque «Txiki» era un defensor de la libertad pero también «miembro de ETA» y, según ha opinado, el homenaje que se le dedica cada año se ha «instrumentalizado» por parte de Batasuna, algo que los populares, ha dicho, «nunca van a apoyar».
La juntera de Aralar, Rebeka Ubera, ha denunciado por su parte la decisión de la Audiencia Nacional de prohibir el homenaje y ha abogado por que las instituciones inicien una «reflexión» sobre su «forma de actuar» en este tipo de casos.
En este sentido, ha reprobado la actuación, a su juicio «desproporcionada», del consejero vasco de Interior, Rodolfo Ares, por ordenar que la Ertzaintza impidiera el acto como consecuencia de la decisión judicial adoptada por la Audiencia Nacional.
El portavoz socialista, Julio Astudillo, ha sostenido que la Audiencia Nacional prohibió el acto y, por tanto, la consejería vasca de Interior «se limitó a cumplir la decisión judicial», por lo que no se debe «responsabilizar» a este departamento.
La juntera del PNV Zorione Etxezarra ha subrayado que «todas las víctimas del horror tienen los mismos derechos y el mismo honor» y ha manifestado que todavía existe una vulneración de derechos porque «no se ha juzgado a los responsables de aquel régimen».
Mikel Izagirre (EB) ha señalado que «todas las víctimas tienen derecho a ser reconocidas» y ha subrayado que «las heridas que abrió la dictadura de Franco no se pueden volver a abrir porque nunca se han cerrado».
Juan Carlos Bengoa, de Hamaikabat, ha reconocido por su parte el «esfuerzo» realizado por el PSE-EE al haber apoyado esta iniciativa, mientras que Jon Lasa (Alternatiba) también ha criticado la actuación de la Audiencia Nacional, que ha calificado de «atropello». EFE
