Un estudio identifica a centenares de vÃctimas del franquismo en Galicia
El proyecto «Nomes e Voces» ha analizado ya el perÃodo de la Guerra Civil y se dispone a abordar la posguerraNomes e voces es el sencillo, pero revelador, tÃtulo de la iniciativa puesta en marcha por la universidades gallegas para estudiar la represión durante la Guerra Civil y el franquismo en la comunidad e identificar a sus vÃctimas. Después de tres años de investigación, los primeros resultados han visto ya la luz en forma de un detallado informe sobre el perÃodo comprendido entre los años 1936 y 1939, pero que incorpora también los datos de represaliados en épocas posteriores obtenidos durante el trabajo de campo.
En el caso de la comarca, el equipo que dirige Lourenzo Fernández Prieto, y que coordina en la provincia de A Coruña Emilio GrandÃo, ha identificado ya a 323 vÃctimas, que corrieron suertes dispares. Algo más de un centenar sufrieron penas de prisión, otras tantas fueron procesadas, pero liberadas finalmente o declaradas en rebeldÃa al encontrarse huidas, y treinta y ocho fueron ejecutadas en distintas circunstancias.
Trece de las vÃctimas mortales fueron juzgadas y condenadas por rebelión; dieciséis, fueron asesinadas de forma extrajudicial (los trágicos paseos), y nueve fallecieron en otras circunstancias diversas (enfrentamientos armados, a consecuencia de palizas e, incluso, en los campos de exterminio nazis). El trabajo de campo y las entrevistas con vÃctimas directas y familiares en primer grado ha permitido a los investigadores identificar también a una veintena de vecinos de la comarca que tuvieron que exiliarse y a seis personas que desaparecieron sin que hasta la fecha haya sido posible determinar su paradero.
Las mujeres
La investigación realizada hasta la fecha solo ha permitido documentar los casos de una veintena de mujeres entre el total de vÃctimas en la Costa da Morte, pero esto no significa que no fuesen muchas más. Según explican los responsables del proyecto, la mayorÃa de las que sufrieron represalias fueron violadas o rapadas, por lo que es complicado encontrar constancia documental de estos hechos.
Además, antes de hacer público el nombre de un represaliado, lo contrastan con varias fuentes diferentes, para evitar errores. Esto ha propiciado que un número importante de posibles vÃctimas permanezcan aún en el anonimato a la de que próximas etapas de la investigación permitan sacar también a la luz sus nombres y sus voces.
http://www.lavozdegalicia.es/carballo/2009/11/11/0003_8097968.htm