La Fundación Francisco Franco calificó hoy de «furia iconoclasta» la «ofensiva» contra los sÃmbolos franquistas
Reivindica la «ingente y fecunda obra del régimen»
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19/01/2010 SERVIMEDIA
La Fundación Francisco Franco calificó hoy de «furia iconoclasta» la «ofensiva» que, a su juicio, ha emprendido el Gobierno para «arrancar de la geografÃa nacional placas, menciones o hitos que puedan recordar», no ya el nombre de Franco, sino «40 años de la historia reciente de España» y a «cualquier persona, institución o entidad ‘contaminada’ por haber prestado su colaboración» a la dictadura.
A través de una nota de prensa, la Fundación dijo que «reviste especial gravedad, por el ámbito en que se realiza y por la entidad de sus destinatarios, la reciente eliminación por orden del Ministerio de Defensa, previo minucioso y humillante inventario y ante el silencio de estupefacción de nuestros soldados, de las menciones, placas y monumentos dedicados a verdaderos héroes de la historia de nuestros Ejércitos, cuyo recuerdo y ejemplo está por encima de contingencias».
Además, denunció la inversión en la tarea de «cuantiosos recursos públicos», cuando hay «necesidades más apremiantes en una nación que roza ya el 20% de tasa de desempleo», y lo que considera «un intento de reabrir la Guerra Civil, invirtiendo el pasado». Igualmente, critica «el silencio ?cuando no la complacencia- del principal partido de la oposición, que no ha acertado aún a comprender la verdadera magnitud de la inicua pretensión que está detrás de esta estrategia».
Frente a esta tendencia, la Fundación Francisco Franco reivindicó la que considera «ingente y fecunda obra del régimen», asegurando que, aún sin sÃmbolos, «va a permanecer en la memoria colectiva de los españoles». En concreto, resalta «las conquistas sociales de los trabajadores, la Seguridad Social y su red hospitalaria, las infraestructuras hidráulicas, viarias y ferroviarias».
Finalmente, la Fundación atribuye al régimen la conversión de «una España atrasada, con altos Ãndices de analfabetismo y con graves desigualdades sociales en una nación moderna y culturalmente avanzada» en «la octava potencia industrial del mundo, con el menor Ãndice de presión fiscal y una situación de pleno empleo que garantizarÃa el éxito de la Transición».