“La Guerra Civil en León”
De Wenceslao Álvarez Oblanca y Secundino Serrano
Se puede adquirir al precio de 19 euros a través de La Librería de El Sueño Igualitario
396 páginas
‘La Guerra Civil en León’ es una obra rigurosa y documentada donde se aúnan la severidad del historiador con la pasión del divulgador, en una visión integradora que, para un ámbito provincial, en pocas ocasiones ha sido resuelta con igual solvencia. Una exposición que indaga en las causas, describe los hechos, singulariza los episodios transcendentales, y analiza las consecuencias de una contienda tan perturbadora como incomprensiblemente desconocida (o conocida a cachos y por tópicos, lo que es peor).
‘La Guerra Civil en León’ esquiva los pasajes más controvertidos, pero tampoco se complace en las leyendas afiliadas, ni concede crédito alguno a la propaganda pseudoerudita, tan de moda hoy. Un compromiso con la verdad documental y la indagación científica, en un intento de arrojar luz sobre un pasaje voluntariamente oscuro de nuestra propia historia.
La Guerra Civil en León describe y evalúa los años cruciales de la provincia en el siglo pasado, y lo hace con el rigor y la solidez de los documentos, los testigos más fiables para conocer un episodio altamente politizado. Pero no solamente estudia el tiempo estrictamente bélico (1936-1939) sino que amplía el marco histórico con el fin de explorar el devenir republicano y también las consecuencias del conflicto.
El primer capítulo empieza con el anuncio de la República en la ciudad de León, en un clima de fiesta y esperanza, subrayando además un aspecto anecdótico pero noticiable: en la villa de Sahagún, en la Tierra de Campos leonesa, se proclamó la República el 14 de abril de 1931, a las 7,30 de la mañana, una hora después de que hiciera lo propio la villa guipuzcoana de Eibar. Sahagún y Eibar se adelantaron a Barcelona (Lluís Companys lo hizo a las 13,30) y Madrid (Alcalá Zamora, a las 20,15).
Con el 14 de abril de 1931 como punto de referencia, el libro va reflejando la evolución y la involución que se producen en una provincia en la que existía un desajuste entre una capital de poderosa tradición republicana, con un alto nivel educativo, y un medio rural mayoritario y conservador, atravesado por el analfabetismo y el control ideológico del clero. Algunas comarcas mineras, con sus peculiaridades económicas y políticas, aparecían como un tercer elemento en la configuración política del León de los años treinta del pasado siglo.
A través de los períodos canónicos de la II República -bienio reformista, bienio conservador, Frente Popular-, el texto indaga en los movimientos políticos y sociales que actúan en la provincia, y también los compara con los del resto de España. El método tiene como objetivo exponer lo que existe de particular en León y aquello que repite y amplía las tendencias en el resto del país. A través de sus páginas, podemos deducir que una clima de normalidad y la ausencia de conflictos graves, más allá de episodios concretos y localizados, fueron notas dominantes en la provincia de León durante
la II República.
La guerra civil se constituyó como el eje central del libro, y su estudio introduce una serie de factores que impugnan los tópicos al uso y aporta además noticias de una geografía, el frente Norte, no excesivamente conocida y poco transitada en los manuales sobre la guerra civil. Al abrigo de Asturias, el norte de León vivió una guerra difícil, aisladas las dos provincias del grueso del territorio republicano, manejándose entre una autonomía que no deseaban y la constatación de que su aislamiento sólo podía conducirlos a la derrota. Un territorio «feudal» que se vio obligado hasta a emitir moneda propia.
La penúltima parte del libro se centra en la represión de los vencidos, tanto la física como la ideológica, y también en la oposición armada contra la dictadura. Resulta aleccionador el discurrir de la represión en la provincia, y aquí también se niegan los tópicos al uso. En una provincia donde apenas habían existido ataques a la propiedad ni a la personas por parte de los republicanos, se desatará un represión contra los vencidos de una increíble desproporción y crueldad. La represión como consecuencia de una represión previa, vendida por tantos divulgadores del neofranquismo, aparece en la provincia de León como un discurso mendaz, sectario y que nada tiene que ver con la documentación
existente en los archivos.
El epílogo se refiere a la vida cotidiana, al devenir de las personas corrientes, los ciudadanos de a pie, en un contexto de pobreza, miedo y represión. Tal vez la crueldad del régimen franquista se perciba con mayor intensidad precisamente en las pequeñas cosas, en el día a día que obligó a vivir a los ciudadanos, especialmente a aquellos que por unas u otras razones -o sin razón alguna: era lo habitual- fueron considerados desafectos. Una palabra que explica un régimen.
Documentos, fotos y otras herramientas gráficas completarán un texto que tiene vocación de hacer llegar a los leoneses una parte sustantiva de su pasado. El libro se completará con una relación actualizada de represaliados en la provincia.
Pensamos que también aquellas provincias que no están catalogadas como centrales en la guerra civil y sus consecuencias, como puede ser el caso de León, tienen derecho a conocer su historia, incluidos aquellos episodios que puedan resultar perturbadores para algunos ciudadanos. Más aún teniendo en cuenta el «Proyecto de ley de reconocimiento y ampliación de derechos y establecimiento de medidas a favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la guerra civil y la dictadura», la conocida como Ley de Memoria Histórica, aprobada en 2007.
La provincia de León apenas dispone de bibliografía sobre la guerra civil y la posguerra, y este libro es una oportunidad para hacer posible una inflexión en esa tendencia. El hecho de que sea un libro a la vez riguroso y divulgativo hará factible que llegue a un elevado número de lectores. Pero la publicación de un libro de historia para un mercado local no siempre resulta fácil, y de ahí la importancia de la participación de las instituciones. Y León también tiene derecho a figurar en el mapa bibliográfico de la guerra civil.
La publicación del libro permitirá también comprobar que los leoneses tuvieron un especial protagonismo en la España de la guerra y la posguerra. En el primer caso, a través de su participación en la llamada insurrección de 1934, uno de los episodios centrales de la II República. En el segundo caso, la aportación leonesa se refiere a la lucha armada antifranquista, conocida popularmente como maquis, que tuvo en la región berciana el solar de la primera organización guerrillera de la posguerra, la Federación de Guerrillas de León-Galicia.
Los autores del libro son pioneros de la recuperación de la historia de la guerra y la posguerra, tanto a nivel provincial como nacional, y fueron de los primeros en investigar y publicar sobre la represión y la disidencia armada. Wenceslao Álvarez Oblanca publicó en 1986 La represión de postguerra en León. Depuración de la Enseñanza, 1936-1943, y en 1993 coordinó Historia del anarquismo leonés.
Por su parte, Secundino Serrano publicó en 1986 La guerrilla antifranquista en León, 1936-1951; en 1989, Crónica de los últimos guerrilleros leoneses, 1947-1951; en 2001, Maquis. Historia de la guerrilla antifranquista; y en 2005, La última gesta. Los republicanos que vencieron a Hitler
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