La banda pamplonesa homenajeó ayer a la republicana Matilde Landa en Can Sales

 

M. ELENA VALLÉS. PALMA. La banda pamplonesa homenajeó ayer a la republicana Matilde Landa en Can Sales y repasó sus éxitos en el Palma Arena.

  Que La tierra está sorda, Barricada canta más alto que nunca, y con conocimiento de causa. Es decir, sin pose. La banda de hard rock quemó ayer sus naves en Palma en un doble concierto: primero en Can Sales y luego en la Fira del Disc.

A mediodía, detrás de la biblioteca pública de Ciutat, ondea la bandera republicana. Enrique Villareal, El Drogas; Javier Hernández, El Boni; Alfredo Piedrafita e Ibon Sagarra, Ibi, están preparados para contar la historia de una serie de presas asesinadas durante el Franquismo, columna vertebral de su último disco. El escenario es más realista que nunca. No hay pose. Dos guitarras, un cajón y las palmas de El Drogas. Los rockeros están en la antigua prisión de mujeres de Palma frente a 200 personas, entre ellas la concejal de Cultura, Nanda Ramon; el director insular del área, Maties Garcias; la presidenta de la Associació Memòria de Mallorca, Maria Antónia Oliver, y el escritor Miquel López Crespí. Frente a ellos, un edificio que esconde mucho sufrimiento y la agonía de la antifascista Matilde Landa, quien inspiró una canción del último trabajo de Barricada. Peter de Echave, vocal de la Associació, y el historiador David Ginard dieron el ´sus´ al homenaje a esta mujer –y las otras presas– que se suicidó en Can Sales en 1942, «un referente moral sobre la que descargó toda su ira la autoridad religiosa por no estar bautizada», evocó Ginard. «Aquí, en Can Sales o Las Hermanitas, había en un principio un centenar de presas mallorquinas. En el 39, vinieron de toda la Península más de mil. Entre ellas, esta mujer culta, formada en la Institución Libre de Enseñanza y a quien Miguel Hernández dedicó un poema. Landa fue también la líder del Comité de Ayuda a los Refugiados y la primera que organizó la resistencia antifranquista clandestina en España», informó.

Aplausos de la parroquia. Y Barricada sigue sin pose. El grupo, que se documentó durante tres años sobre la represión franquista para componer su último disco, quería conocer el lugar donde sufrió Matilde. Can Sales. Y, por supuesto, le cantaron su canción. El Drogas le puso desgarro: «Matilde Landa, republicana, no pudieron colgar de tu pecho ni crucifijos ni sotanas. Matilde Landa, republicana, no pudieron colgar de tu pecho señales amargas».

Ya en la cárcel de Ventas, Landa organizó la Oficina de Penadas, explicó el cantante, «que era para que el resto de presas no cayera en una depresión y se aislase. Se dedicaban a mandar cartas a sus pueblos para que el alcalde o el cura les consiguiesen los avales necesarios para poder conmutar las penas de muerte por 30 años de cárcel. Cuando lo conseguían, era una fiesta», apuntó.

Barricada también se echó al cuerpo Pétalos, el tema dedicado a las trece rosas – «rojas, que no se olvide», detalló El Drogas–, a saber, las trece mujeres que fueron sacadas del penal de Ventas para ser acribilladas a tiros en el camposanto.

Las canciones de la mañana volvieron a sonar por la tarde en el Palma Arena, donde está instalada la Fira del Disc, en un concierto que duró tres horas. En la primera parte, sonó todo La tierra está sorda, con el temazo Hasta siempre, Tensi. La segunda parte de la actuación, menos conceptual, fue para los grandes éxitos. Una tarde sin pose, «para que no se eche más tierra sobre este asunto de la represión franquista», «un reconocimiento también a todos vosotros», concedió El Drogas en Can Sales.

http://www.diariodemallorca.es/sociedad-cultura/2010/10/11/barricada-doble-ejercicio-memoria/610142.html