Memoria / Guerra / No creáis que he muerto
Memoria
A la memoria de los asesinados, no se olvide su asesino. Al golpe triste de sus pasos, robados de su camino.
A la muerte que les vino, sin esperar, sin hacer ruido. A sus manos rotas, a su vida, a su olvido.
A los canallas, a su risa, a su sueño tranquilo. A su mirada dura, a su porte altivo.
Guerra
qué se yo de sus guerras ni de la muerte que cosechan pero sus balas me conocen y me atan a la tierra.
no conozco sus pesares si los tienen y los piensan sólo camino la misma senda que no pisan ni contemplan.
no recuerdan lo que buscan ni saben que lo encuentran envidian lo que vive más allá de sus fuerzas.
No creáis que he muerto
no creáis que he muerto al ser derrotado las huellas sólo están vacÃas si no se han labrado.
no penséis que me he perdido sólo estoy cansado de mirar la tierra rota y los sueños arrasados.
no digáis que he huido si en el campo he quedado no miréis el cielo mirad vuestras manos.
no me cerréis los ojos porque aún no he llorado ni he visto las cadenas rotas por los arados.
no quiero morir, aún no he terminado de andar sencillo y de besar despacio.
si dejáis vuestras voces atadas a vuestros labios que una mortaja de ramas me hiera los brazos.
pero si recordáis mi risa y cantáis mi llanto que mis gritos muertos golpeen como hachazos.