Guadalajara: Las lluvias y el terreno irregular ‘hunden’ la nueva fosa común
El Foro por la Memoria de Guadalajara se ha mostrado muy crítico con la realización de esta obra y, sobre todo, con su pronto deterioro
Después de la oposición de los familiares de las víctimas del Franquismo, que querían llevar a cabo un proyecto más centrado en las personas que fue inhumadas allí, un problema del terreno ha revelado una serie de deficiencias en su compactado que han generado varios socavones en la pradera de césped que cubre el recinto apenas tres semanas después del final de las obras.
A lo largo de la zona ajardinada, de alrededor de veinte metros cuadrados, varias zonas presentan hundimiento de la superficie, lo que también ha desplazado la capa de césped. Según ha explicado a EL DÍA el concejal de Servicios Públicos Municipales, Mariano del Castillo, se trata de un suceso “normal”, ya que “este terreno ha sido una fosa durante muchos años”.
A pesar de que se ha llevado a cabo el compactado del terreno durante las obras de remodelación, “la lluvia ha hecho que el terreno se junte más”, lo que ha creado hoyos en algunos puntos de la zona ajardinada, ha explicado el edil responsable de este área. Y es que, según ha detallado el concejal, esta parcela “se ha utilizado como sepultura mucho tiempo”, de modo que “el terreno no estaba asentado” y la filtración de las lluvias ha originado una compactación natural del material de relleno introducido durante su reforma.
Dado que el periodo desde la finalización de las obras ha sido tan corto, la empresa que se ha encargado de llevar a cabo el proyecto de remodelación de esta zona tendrá que afrontar esta reparación dentro del periodo de garantía de dos años. Así, los trabajos a llevar a cabo supondrán “levantar los rollos de césped y compactar nuevamente el terreno para rellenarlo más”, ha explicado Del Castillo, que ha anunciado que se llevarán a cabo “en los próximos días”.
Críticas
El Foro por la Memoria de Guadalajara se ha mostrado muy crítico con la realización de esta obra y, sobre todo, con su pronto deterioro. Así, denuncian que “apenas diez días después de terminado el arreglo llevado a cabo por el ayuntamiento de Guadalajara en la fosa común del cementerio municipal, donde fueron fusilados y enterrados al menos 820 republicanos, y cuyo espacio fue reformado sin contar con la opinión de los familiares ni del Foro por la Memoria, se ha hundido parcialmente”.
El portavoz del Foro, Xulio García, ha afirmado que “todo esto podría haberse evitado si se hubieran tenido en cuenta los informes históricos del Foro por la Memoria y la opinión de los familiares”, recordando que, “aunque la mayoría de cuerpos que ocupaban la fosa común fueron trasladados al osario contiguo en distintas fases, cabe la posibilidad de que todavía queden algunos cuerpos en el fondo de la misma”, de modo que “el terreno es inestable por los huecos dejados”.
“El espacio, cuya reforma fue terminada el pasado 1 de noviembre, ha sido rediseñado con cincuenta metros de césped y con varias piedras de gran tamaño”, ha explicado el representante del Foro guadalajareño, criticando que “la memoria no se puede esconder debajo de césped y toneladas de desprecio”.
Aprovechando el deterioro de la zona, García ha denunciado también que “el texto que acompaña a la estela colocada, es además, un insulto a las víctimas, pues no indica que los que ocuparon ese lugar fueron asesinados por defender la democracia y la libertad y enfrentarse a un golpe de estado”. “Los intentos de maquillar el pasado llevados a cabo por el PP fracasarán mientras no se haga una actuación integral que incluya su verdadera dignificación”, ha afirmado.
