«Perdà a mi hija, pero no la fuerza. Su fuerza la tengo yo»
El testimonio de dos mujeres represaliadas por las dictaduras española y argentina clausura el primer congreso de vÃctimas del franquismo
ANNA FLOTATS RIVAS-VACIAMADRID
«¿Cómo va a tener España una polÃtica comprometida con los Derechos Humanos con semejante déficit interior?». El director de AmnistÃa Internacional, Esteban Beltrán, ha dejado en el aire esta pregunta para demostrar que la justicia con las vÃctimas del franquismo no es una cosa del pasado, sino que la batalla por la memoria histórica es «una lucha de futuro».
Aun asÃ, en la clausura del primer congreso de vÃctimas del franquismo, organizado por la Federación Estatal de Foros por la Memoria y celebrado este fin de semana en Rivas-Vaciamadrid, han sido obligados dos viajes al pasado. El primero, de la mano de Carlota Leret, hija del que se considera el primer fusilado de la guerra. «Mi madre [tras ser encarcelada y separada de sus hijas], murió convencida de que a mi padre le hicieron un consejo de guerra y murió el 23 de julio», ha relatado Carlota, que a lo largo de 10 años investigando el pasado de su familia ha descubierto que nada de eso fue verdad. Carlota, que como ella cuenta, tuvo el «triste privilegio de ser testigo de los primeros disparos que después iban a ensangrentar el mundo», tiene ahora otro triste privilegio: el de vivir en «una democracia donde todavÃa se denomina movimiento nacional a los facciosos» y donde «con dinero público, se hacen libros que dicen que la dictadura fue un régimen autoritario». «Es el Estado el que tiene que hacer que vÃctimas y victimarios ocupen el lugar que les corresponde en la historia de España», ha concluido Carlota que, tras un sentido «¡Viva la República!» ha puesto en pie a todo el auditorio.
El segundo viaje al pasado ha estado guiado por Estela de Carlotto, presidenta de la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo. «En 1995, con mi hija Laura en brazos, yo salà a avivar esa dictadura porque habÃa una prensa y una iglesia cómplices que decÃan que ese gobierno tenÃa que salir», ha confesado Estela. Esa misma dictadura le arrebató a su hija Laura y a su nieto, un varón que nació en una cárcel clandestina al que lleva buscando desde hace más de 30 años. «Si en vez de estar ahà hubiera estado levantando la voz, que tuve que levantar después, Laura y sus 30.000 compañeros que desaparecieron estarÃan vivos».
Estela de Carlotto: «Está triunfando la verdad, el bien sobre el mal» Estela ha reconocido que, por miedo, quiso desalentar la lucha de Laura: «Quisimos hacer idiotas a nuestros hijos, tal y como éramos nosotros». «Laura decÃa que luchaba por la justicia social. Yo un dÃa le dije: ‘Te van a matar’. Y recuerdo que ella me respondió: ‘Mamá, nadie quiere morir. Todos tenemos un proyecto de vida. Pero miles de nosotros vamos a morir y no será en vano’. No ha sido en vano», ha relatado emocionada. «Perdà a mi hija de 23 años, pero no perdà la fuerza. La fuerza de ella la tengo yo.»
Estela lleva «35 años caminando», como ella dice. Y lo mismo hacen cada jueves, todavÃa hoy, madres y abuelas que buscan a sus hijos y nietos. «Nos llamaban las locas de la Plaza de Mayo», ha recordado. Esas «locas» han conseguido encontrar 105 niños, «un triunfo de la verdad y del bien sobre el mal», ha afirmado Estelaa, «en Argentina nunca se bajaron los brazos».
El diputado de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Joan Tardà , también ha defendido la necesidad de seguir librando «la batalla ideológica» pero, en su opinión, se ha llegado a un callejón sin salida. «Los que gobiernan ahora son el ariete de la FAES, con lo cual, esperamos incluso una ofensiva. El PP va a contaminar todo aquello vehiculado por las izquierdas», ha afirmado.
La amnesia como enemiga
Tardà , a cuyo grupo el Congreso ha vetado 40 preguntas sobre las cuentas del rey, ha reconocido que «Esquerra ha agotado toda la munición». «El rey de España es cómplice de los asesinatos de Estado. En 30 años nunca ha tenido la dignidad de pedir perdón y, lo más preocupante, nunca ha sentido la necesidad de hacerlo», ha sentenciado, aplaudido luego por el público.
Tardà ha insistido en que «la ley de memoria está en jaque». «Pero tenemos que construir el escenario para que estén jaque mate», ha aseverado. «En el contexto actual la herida sólo cicatrizará bajo el imperativo de la amnesia, nuestra gran enemiga».
En la misma lÃnea, Esteban Beltrán ha insistido en la necesidad de modificar el contexto actual ilustrando «la contradicción asboluta» en que vive España: «No conozco ningún paÃs que delegue la exhumación de fosas a los familiares. Respetar a las vÃctimas es garantizar el acceso a la justicia».
Tras el congreso, la asamblea de asociaciones memorialistas y de vÃctimas del franquismo ha acordado crear una comisión de trabajo a nivel estatal para elaborar un catálogo de reivindicaciones sobre todo lo denunciado durante el fin de semana.
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