El Diccionario Biográfico incluirá una adenda con las revisiones y correcciones
Se incorporarán a «futuras ediciones del Diccionario y a su versión digital»
MADRID, 23 Sep. (EUROPA PRESS) –
El Diccionario Biográfico de la Real Academia de Historia incluirá una adenda donde quedarán reflejadas todas las biografías que la Comisión, encargada de revisar y mejorar el diccionario, considere que precisan «actualización o revisión».
No obstante, estas correcciones incluidas en la adenda se incorporarán a «futuras ediciones del Diccionario y a su versión digital», según informa el Gobierno en respuesta parlamentaria a una pregunta presentada por la diputada de Izquierda Plural, Ascensión de las Heras Ladera.
En esta adenda constarán: los principios generales de actuación de la Comisión; una fe de erratas con los errores cronológicos, de denominación o cualquier otro que se haya detectado; un recordatorio de las denominaciones homologadas; notas críticas aclaratorias de la utilización de expresiones o conceptos; referencias cruzadas para ampliar o matizar el contenido de biografías que se consideren incompletas y bibliografías complementarias y complementos a ciertas voces.
Sin embargo, desde el Gobierno alegan en el trabajo sobre el Diccionario todavía se está desarrollando en la Real Academia, por lo que, hasta su finalización, «no puede existir un inventario cerrado de esas revisiones».
En junio de 2011 la Real Academia de la Historia se vio obligada a crear una Comisión para revisar y corregir esta obra tras el contenido publicado en algunas biografías, como la de Francisco Franco, realizada por el historiador Luis Suárez Fernández. El Pleno de la Academia de 4 de mayo de 2012 aprobó el último informe, hasta la fecha, de la Comisión para la revisión del Diccionario.
REVISIÓN MÁS PROFUNDA DE ENTRADAS
En este sentido, desde la Academia declaran que el proceso de revisión y mejora incluye una amplia gama de actuaciones: desde la mera corrección de erratas, la rectificación o actualización de datos, o la ampliación de las bibliografías, hasta las correcciones terminológicas o la revisión más profunda de algunas entradas.
De lo publicado en los primeros 25 volúmenes, la Comisión ha revisado casi 500 biografías, referidas al pasado reciente (personajes nacidos entre 1875 y 1931), proponiendo redacciones complementarias, revisiones parciales y matizaciones.
La Comisión también ha revisado otras 500 entradas posteriores a la letra H, aún no publicadas, indicando modificaciones que se han incorporado a las biografías con acuerdo de sus autores.
Asimismo, desde el Ejecutivo señalan que el mantenimiento y actualización del Diccionario es una tarea permanente, y por esta razón el «Parlamento ha venido aprobando desde 2007 una subvención nominativa a la Real Academia de la Historia para esta finalidad. El proceso de revisión de que se trata se incluye en esas actuaciones».
Finalmente, alegan que el Gobierno no ha interferido en la elaboración, supervisión, aprobación o edición de los contenidos del Diccionario, «puesto que se ha respetado la independencia científica que constituye un rasgo esencial de la naturaleza de las Reales Academias».
«Por la misma razón, tampoco el Gobierno interviene, dirige ni supervisa el proceso de revisión, el cual se está desarrollando, como debe ser, en el ámbito académico y con criterios exclusivamente científicos».
