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Pamplona. Los caídos: El incierto destino de un monumento cuestionado

Noticias de Navarra, 28-10-2012 | 30 octubre 2012

Tras años de litigios y polémicas resoluciones judiciales

 

 

EL CÉNTRICO EDIFICIO, CONVERTIDO EN SALA DE EXPOSICIONES, CONTINÚA SUSCITANDO CONTROVERSIA SOBRE USO Y SIMBOLOGÍA

PAMPLONA, EUGENIO MARTÍNEZ – Domingo, 28 de Octubre de 2012

TRAS años de litigios y polémicas resoluciones judiciales, del empeño de unos por rehabilitar la memoria de los represaliados bajo el yugo franquista y la renuencia de otros a romper con el pasado, el Monumento a los Caídos «por Dios y por España» sigue en pie, altivo e imponente, en pleno centro de Pamplona, en el mismo lugar donde la megalomanía nacionalcatólica decidió erigirlo en 1942.

La realidad es que, a pesar de las décadas que han pasado por él, poco o nada ha cambiado en este edificio desde entonces. Tras el enorme letrero que lo presenta, asépticamente, como Sala de Exposiciones, pervive oculta la inscripción Navarra a sus Muertos en la Cruzada, al igual que se mantienen todos los escudos e inscripciones franquistas, cubiertos por cartelones.

En sus entrañas, en una cripta que todavía acoge tenebrosas ceremonias más propias de tiempos pasados, entre pinturas alegóricas y loas «al espíritu religioso y guerrero de la Navarra inmortal», siguen reposando los restos de dos de los máximos responsables del golpe de Estado de 1936, los generales Mola (aquel que escribiera «es necesario crear una atmósfera de terror, hay que dejar sensación de dominio eliminando sin escrúpulos ni vacilación a todo el que no piense como nosotros») y Sanjurjo. A día de hoy, la Hermandad de Caballeros Voluntarios de la Cruz aún venera su recuerdo y continúa celebrando misas en su honor, en una atmósfera de ocultismo y clandestinidad que el Arzobispado parece consentir.

UN POCO DE HISTORIA El 19 de mayo de 1998, la Iglesia cedió la titularidad de los12.299,86 metros cuadradosdel edificio al Ayuntamiento (con la condición expresa de que no retirara ni modificara de forma definitiva ninguno de sus elementos, y de que las actividades que se desarrollasen respetaran el sentido del monumento), quedándose en régimen de usufructo «la cripta central y las dependencias bajo el arquerío lateral izquierdo», para uso y disfrute de la parroquia de Cristo Rey y el propio Arzobispado.

Años más tarde, el Consistorio, gobernado por aquel entonces por UPN y CDN, emprendió la restauración del edificio. Se decidió mantener los escudos e inscripciones franquistas, que quedaron ocultos a la vista tras unos carteles, y el espacio se convirtió en sala de exposiciones.

Acogiéndose a la Ley Foral de Símbolos de Navarra, aprobada en 2003, que ordenaba la retirada y sustitución de toda la simbología preconstitucional, algunos grupos de la oposición instaron al Gobierno a tomar medidas respecto al Monumento a los Caídos, pero el Ejecutivo se acogió al cambio de uso de la dotación para impedir cualquier iniciativa al respecto, alegando que el edificio carecía ya de connotaciones franquistas. Los recursos presentados al Tribunal Administrativo de Navarra (TAN) no obtuvieron sus frutos, ya que éste dio por buenos los argumentos del Gobierno. Tampoco la Ley de Memoria Histórica, que salió adelante en2007, hasupuesto ningún avance en este sentido.

La última polémica vino de la mano del nombre de la plaza en la que se levanta el edificio, durante décadas dedicada a la memoria de Tomás Domínguez Arévalo, primer ministro de Justicia de Franco y Conde de Rodezno (1882-1952), al que se atribuye el triste récord de haber firmado 50.000 sentencias de muerte durante su mandato. A principios de 2009, el Pleno aprobó -con los votos de NaBai, PSN y ANV- una moción para sustituir el nombre de esta plaza, resolución que Yolanda Barcina, alcaldesa por aquel entonces, se negó a hacer efectiva, lo que le valió un nuevo recurso ante el TAN.

Finalmente, obligada por las circunstancias, Barcina eliminó de las placas el recordatorio al ministro franquista, sustituyéndolo por el de Condado de Rodezno, una referencia al título nobiliario creado en 1790, en una triquiñuela legal duramente criticada por la oposición.

NUDA PROPIEDAD Otra cuestión que plantea interrogantes es la de la situación registral del edificio. Un informe del letrado del área de Hacienda Local, realizado por mandato del Pleno, advirtió al Ayuntamiento en enero de 2011 de la necesidad de registrar a su nombre determinados bienes o derechos de uso vinculados a edificios religiosos, entre los que se encontraba el Monumento a los Caídos. A pesar de que, como se ha dicho, el Arzobispado donó en su día el edificio al Consistorio, este debería acometer las gestiones pertinentes para proceder a la inmatriculación en el Registro del derecho de propiedad de la Sala de Exposiciones Conde Rodezno y la nuda propiedad de las dependencias en régimen de usufructo. De no realizar este trámite, pasados veinte años la Iglesia tendría derecho a solicitar la usucapión, es decir, la prescripción adquisitiva, y revocar el acuerdo.

http://www.noticiasdenavarra.com/2012/10/28/sociedad/navarra/los-caidos-el-incierto-destino-de-un-monumento-cuestionado