El rector GarcÃa-Alas, fusilado en 1937, nombrado hijo predilecto de Oviedo
«Murió con coraje moral por causa de su ideologÃa republicana» y «se convirtió en un hombre para la eternidad», ha glosado
Leopoldo GarcÃa-Alas GarcÃa-Argüelles, hijo del escritor «ClarÃn», rector de la Universidad de Oviedo durante la II República y fusilado por las tropas franquistas en1937, hasido nombrado hoy hijo predilecto de la ciudad de Oviedo a tÃtulo póstumo.
El alcalde, AgustÃn Iglesias Caunedo, del PP, en la ceremonia de entrega de la distinción a la familia, ha subrayado que es un acto «para restituir la memoria, sin distinción de bandos ni banderas» y «simplemente reconocer méritos intelectuales» de «una gran persona y un gran ovetense».
La concesión del tÃtulo, propuesta por el PSOE y apoyada por los otros tres grupos (PP, Foro e IU), otorga la máxima distinción del Ayuntamiento de Oviedo a la «gran proyección intelectual y académica» del rector Alas, doctorado en Derecho y al frente de la universidad asturiana desde 1931 hasta su detención en julio de 1936 durante el golpe de estado militar.
«Me gusta hablar de las personas más allá de las ideologÃas o los bandos», ha dicho el alcalde, que ha añadido: «No es tiempo de reescribir la historia, es tiempo de restituir la memoria».
El tÃtulo ha sido recogido por el único bisnieto del rector Alas, José TolÃvar Pueyo, de 16 años, nacido, como ha recordado, en un régimen constitucional con las divisiones del pasado superadas.
Con «gratitud y emoción», en nombre de su familia, el bisnieto ha recordado que el rector Alas «amó a esta ciudad y a Asturias entera» y que reconstruyó la Universidad destruida en la revolución obrera de octubre de 1934, además de ser «un vecino modélico» de Oviedo.
El catedrático de Derecho Constitucional Ramón Punset ha glosado durante la ceremonia la vida del rector Alas, nacido en 1883, hijo primogénito del autor de «La regenta» (Leopoldo Alas «ClarÃn»), se licenció en Derecho en Oviedo y ejerció en Madrid y Alemania antes de regresar a su ciudad natal al obtener una cátedra en 1920.
«Alas fue defensor de un Estado social y democrático de Derecho» y «convencido de la educación popular», ha reseñado Punset antes de indicar que «apostó por la república como proyecto transformador» y sufrió «la brutalización polÃtica de la Europa de entreguerras».
Ha agregado que «para él octubre del 34 debió de ser espantoso», porque «repudiaba los sectarismos» y defendÃa la reconciliación y la concordia.
«Murió con coraje moral por causa de su ideologÃa republicana» y «se convirtió en un hombre para la eternidad», ha glosado.
