Unas 100.000 personas se manifiestan en Budapest contra la ultraderecha
Tras la propuesta de hacer listas de judÃos
BUDAPEST, 3 Dic. (Reuters/EP) –
Unas 100.000 personas se han manifestado este domingo en Budapest contra el partido de ultraderecha Jobbik, después de que algunos de sus legisladores propusieran elaborar listas de judÃos para expulsarles del paÃs europeo, avivando con ello el fantasma del nazismo.
La manifestación se ha celebrado frente al Parlamento y ha congregado a lÃderes del partido gobernante y de los partidos opositores, entre otras personas, en un gesto sin precedentes en la escena polÃtica húngara, que se caracteriza por sus profundas divisiones.
«No podemos permitir que se repitan cosas que pertenecen a las páginas más oscuras de los libros de historia», ha dicho Antal Rogan, lÃder del grupo parlamentario del partido gobernante, Fidesz, en el marco de la multitudinaria manifestación.
«El fascismo es un virus y Jobbik es quien está propagando el virus», ha advertido, por su parte, Attila Mesterhazy, lÃder del Partido Socialista, la principal fuerza opositora de HungrÃa.
En la misma lÃnea se han expresado otras formaciones opositoras. «Si queremos una nueva era de normalidad en la polÃtica húngara, debemos formar un único equipo en contra del nazismo», ha apuntado el lÃder del Movimiento 2014, el ex primer ministro Gordon Bajnai.
La ciudadanÃa ha aplaudido la exhibición de unidad de los partidos polÃticos húngaros en contra de un posible resurgimiento del nazismo. «Es importante que todos nos manifestemos contra lo que está pasando en HungrÃa, porque este movimiento fascista es una vergüenza», ha considerado Gyorgy Sarkozy, uno de los participantes.
La polémica se desató el pasado lunes, cuando Marton Gyongyosi, uno de los 44 legisladores de Jobbik, en un Parlamento de 386 escaños, propuso, en el marco del debate sobre el conflicto en Oriente Próximo, «anotar» a los húngaros de ascendencia judÃa que puedan suponer una amenaza para la seguridad nacional.
Poco después, Gyongyosi matizó que se referÃa solamente a los húngaros con pasaporte israelà en el Gobierno y en el Parlamento y adelantó que no presentarÃa su dimisión, pese a la insistencia del resto de partidos polÃticos.
El Gobierno de Viktor Orban emitió un comunicado para condenar las declaraciones de Gyongyosi y para prometer que hará «todo lo necesario» para erradicar las voces extremistas y racistas, en concreto las antisemitas.
En respuesta, Jobbik ha emitido un comunicado este domingo en el que califica todas estas reacciones de «alarmismo polÃtico», indicando que se deben a la desesperación de los otros partidos ante el imparable ascenso de la formación ultraderechista.
Jobbik se creó en 2003, pero fue en 2006 cuando comenzó a acaparar la atención de la polÃtica húngara, hasta que en 2010 se convirtió en la tercera fuerza parlamentaria, tras una campaña electoral en la que vilipendió a la minorÃa romanÃ.
Los analistas polÃticos han alertado de que Jobbik podrÃa ejercer de bisagra entre Fidesz, de centro-derecha, y las formaciones opositoras de izquierda, en las próximas elecciones, cuya celebración está prevista para 2014.
De acuerdo con el Memorial Centre de Budapest, entre 500.000 y 600.000 judÃos húngaros murieron en el Holocausto. De los supervivientes, unos cuantos lograron llegar a Israel. Actualmente, hay 100.000 judÃos viviendo en HungrÃa.