El lehendakari, Iñigo Urkullu, anuncia un ‘programa base de prioridades’ para impulsar la memoria histórica

 

Quiere promocionar una ‘una pedagogía que garantice la no repetición de la violencia’

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha anunciado hoy que el Gobierno vasco va a presentar un «programa base de prioridades» que definirá el «mapa» de actuaciones en materia de memoria histórica en Euskadi y con el que impulsará «una pedagogía social que garantice la no repetición de la violencia».

Urkullu ha elegido el Alto de San Miguel de Elgoibar (Gipuzkoa), el lugar donde el 25 de septiembre de 1936 dos compañías de gudaris se enfrentaron a las tropas del general Mola en la batalla de Aiastia, para anunciar ese plan, que estará apoyado en el derecho internacional, como recuerdo y homenaje a esos jóvenes caídos en la Guerra Civil.

El lehendakari ha acudido a Ziardamendi acompañado por los consejeros Josu Erkoreka, Arantza Tapia, Juan Mª Aburto, Cristina Uriarte y Ana Oregi, así como de la Directora de Víctimas y Derechos Humanos, Monika Hernando.

Este acto, al que se ha sumado también la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejería, se ha desarrollado entre el frontón de San Miguel y las laderas de Zirardamendi, lugar en el que se han exhumado varias fosas e identificado dos gudaris y donde hoy se ha realizado una ofrenda floral.

Urkullu ha destacado el valor de aquellos jóvenes de «todas las ideologías: abertzales, socialistas, comunistas y anarquistas», cuyo «sacrificio detuvo la conquista franquista y posibilitó la constitución en Gernika del primer Gobierno vasco».

Ha destacado que el acto que conmemora la batalla de Elgoibar sirve para «recordar y reparar» y junto a los celebrados esta semana busca «un doble objetivo de pedagogía democrática».

En primer lugar, «demostrar que la injusticia tiene consecuencias y cerrar, con ello, el paso a la impunidad, a la repetición de hechos similares en el futuro» y, en segundo lugar, «asentar la conciliación y normalización de la convivencia sobre la base de la verdad de los hechos objetivos: el reconocimiento de las violaciones de los derechos humanos».

«Este acto mirando al pasado construye la convivencia futura de Euskadi», ha subrayado el jefe del Gobierno vasco.

Ha asegurado que el compromiso de su Ejecutivo «con las personas» es también el «compromiso frente a la injusticia y solidaridad con las víctimas de graves vulneraciones de derechos humanos» y con «la dignidad humana y el derecho internacional de los derechos humanos».

«Es el compromiso con la defensa de los principios democráticos y la convivencia. Nuestra misión es favorecer y fortalecer una convivencia conciliada, justa e integrada. Este es el valor superior», ha recalcado.

Y por ello, ha destacado que el Gobierno vasco avanza «con objetivos definidos», el primero de ellos para «promover una política pública de víctimas que ponga luz sobre las vulneraciones de derechos humanos producidas, reconozca la injusticia del daño causado a las víctimas del franquismo y les ofrezca una reparación, cuando menos moral».

El segundo objetivo «se abre al conjunto de la sociedad y se concentra en la memoria» para «promover una política pública de memoria que reconozca la injusticia histórica que supuso la dictadura franquista».

Una política «orientada a rescatar los valores y esfuerzos que, en plena Dictadura, pugnaron por defender la dignidad, la libertad y la democracia» y que «impulse una pedagogía social que garantice la no repetición».

«No repetición, nunca más a la violencia en nuestro pueblo», ha enfatizado Urkullu, que ha otorgado a este acto de recuerdo «la máxima relevancia» y por ello ha hecho público que su Gobierno va a presentar ese un «programa base de prioridades» sobre memoria histórica.

http://www.elmundo.es/pais-vasco/2014/09/21/541f0404e2704ef04d8b4583.html