La sombra del franquismo
¡Cuánto camino nos queda por recorrer en España para una cultura realmente democrática!
JUAN Carandell Rojo    12/04/2016
El 20 de noviembre de 1975, morÃa en su cama el dictador Francisco Franco Bahamonde, GeneralÃsimo de los tres Ejércitos, Caudillo de España, jefe del Estado durante 39 años y jefe del Gobierno durante 35 años.
Hace poco se han cumplido 40 años de esto y aún España sigue con gran influencia de su dictadura. No solo a nivel polÃtico o en las diferentes instituciones del Estado, sino a nivel social y en la forma en que la ciudadanÃa española se ha enfrentado a la polÃtica y encara su participación en ésta.
Por otro lado esto también ha afectado directamente a la clase polÃtica española, teniendo en cuenta el desapego y la desconexión con la realidad de las personas de a pie que habitualmente han tenido los polÃticos en su mayorÃa.
El franquismo, no ya la figura de Franco sino todo el aparato de poder, llegó a gobernar España por medio de un golpe de estado fallido que derivó en la posterior guerra civil. En estos primeros momentos y con el auge del nazismo y del fascismo, la forma de gobernar el paÃs estaba claramente inspirada en estos regÃmenes aliados que permitieron su ascenso.
Esta apariencia de pistoleros aguerridos con camisas azules y boinas rojas acabarÃa a los pocos años. Los Aliados habÃan derrotado al Eje y Franco se veÃa solo y sin apoyos. Aun siendo el comienzo de la Guerra FrÃa, los modos y maneras del franquismo no gustaban a nadie. El franquismo supo evolucionar y durante los años 50 cambia la apariencia falangista por la apariencia tecnócrata. Y asà es como no solo España logra integrarse en el bloque Occidental, sino crear una consciencia pública recelosa y distante de los polÃticos y una clase polÃtica lejana y soberbia. España de repente se habÃa convertido en una democracia orgánica.
Es aquà cuando el franquismo hace su lavado de cara, se construyen pantanos y se realizan los planes de Desarrollo. El NODO clamaba a bombo y platillo sobre las bondades y virtudes del régimen. Por supuesto, todos estos tecnócratas, muy serios y muy trajeados, manejaban el paÃs. Con corruptelas y con otros dos exilios económicos en los 50 y los 60. En España llegaba el turismo. Manuel Fraga nos vendÃa como Spain is Diferent . Y habÃa triunfado la tecnocracia, el gobierno de los que sabÃan.
No importa que durante esta época se creasen fortunas a base de estafas inmobiliarias, mano de obra casi esclava, conmutando penas por trabajo a la masa perdedora de la guerra, y prácticamente todo el Estado se moviese a base de favores y pequeños sobornos. Para 1974, España habÃa recuperado el nivel de vida de 1934. Por el camino tenÃamos grandes bloques de pisos hechos con amianto, una ruinosa industria nacional y un pensamiento generalizado, basado en la propaganda masiva, sobre el triunfo de los planes de Desarrollo y el gobierno de los más preparados y de los que saben.
¡Cuánto camino nos queda por recorrer en España para una cultura realmente democrática!
* Licenciado en Historia y miembro del grupo de investigación Etnocórdoba
http://www.diariocordoba.com/noticias/opinion/sombra-franquismo_1032676.html