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Zamora: 55 nombres rescatados de las cunetas del olvido

Laura Rivera.  La Opinión de Zamora, 03.04.2017 | 4 abril 2017

Los derrotados han resistido el tiempo del olvido y se vuelven a oír sus voces de esperanza

 

Han tenido que pasar 81 años para que el alcalde, doce concejales y cuarenta y dos funcionarios públicos del ayuntamiento de Zamora que fueron represaliados en julio de 1939, y algunos asesinados poco después, sean rescatados de las cunetas del olvido donde fueron enterrados por los golpistas que ganaron la guerra.

Veintiún vigilantes sobre carnes y vinos, once concejales, seis guardias municipales, cuatro bomberos, dos jardineros guarda de paseos, un jefe de jardines, un recaudador y lector de contadores del agua, un médico, un secretario municipal, un delineante, un auxiliar de intervención, un interventor, un veterinario titular, un inspector de arbitrios, un ordenanza, y el alcalde. Todos cesados como servidores públicos.

Mateo el guardia, Eusebio el médico, Ramón el secretario, Fernando el delineante, Luis el bombero, acompañados de un doloroso paréntesis, «(fusilado)». Sin paréntesis: ¡Asesinados!

Un gran paréntesis de 81 años tras el que, ¡por fin!, en la ciudad a la que representaron como cargos municipales y en la que trabajaron como empleados públicos del Ayuntamiento, se les desentierra de la cuneta del olvido y se les lleva al Pleno para leer sus nombres y votar, por unanimidad, una Declaración de Reparación y Reconocimiento Personal.

Junto con el reconocimiento personal y la reparación de los 55 «servidores públicos» -como aparecen citados en el expediente administrativo- el Pleno también retira los honores y distinciones que en el fragor de la victoria se concedieron a los ganadores, y el nombre de dos calles que aún conmemoran a quienes vulneraron la legalidad republicana que el pueblo español había decidido democráticamente. En este caso, lamentablemente, sin unanimidad.

Han tenido que pasar 10 años desde que se aprobara con todas las de la ley la denominada «Ley de la Memoria Histórica», para que se cumpla en la ciudad de Zamora.

Habrá quien diga que es una pérdida de tiempo y que hay temas más importantes que resolver. Pero no es una pérdida de tiempo sino recuperar la memoria y el tiempo históricos, para que el pueblo conozca su historia y no esté condenado a repetirla. Es además del cumplimiento estricto de la Ley, la recuperación de la Justicia.

No es perder el tiempo recordar a Ramón, Alejo, Isaías, Darío, Narciso, Bernardo, Demetrio, Enrique, Antonio Pérez, Maximino, Antonio Francia, Gerardo, Ricardo, Ildefonso, Manuel, Cipriano, Francisco Rodríguez, Julio, Francisco Tola, Antonio, Luis, Nicolás, Juan Manuel, Juan, Carlos, Manuel, José Diego, José, Félix, Ramón, Marcelino, Antolín, Antonio, Felipe, Práxedes, Tomás, Agustín, Antonio Centeno, Laureano, Prisciliano. Todos cesados.

No es perder el tiempo recordar a los 5 fusilados, entre paréntesis. Ni a los 12 cargos públicos elegidos democráticamente concejales de la ciudad, 5 también fusilados. Y a su alcalde.

Y si lo fuera, merece la pena, y dedicar unas horas, a construir una ciudad que es más de todos porque en su memoria se reconoce a los vecinos que enterraron en el olvido 81 años de injusticia y 10 de no tener tiempo para cumplir la Ley de la Memoria.

En el ayuntamiento de Zamora recordamos a los vecinos de la ciudad donde vivieron, fueron represaliados y fusilados. Una ciudad que les había olvidado como se pretende olvidar la infamia, porque no otra cosa fue su cese, su muerte.

Concejales Barayón, Sever, López Ferrero, Rueda, Alonso Salvador, Asorey, Carreras, Alonso Maillo, Salvadores, Villalba, López Escuadra. López García, alcalde.

Sus nombres son nuestra memoria, la memoria colectiva que fue arrebatada para que en la ciudad habitase el olvido de su persona, de su trabajo, de sus ideas.

Los derrotados han resistido el tiempo del olvido y se vuelven a oír sus voces de esperanza

Nunca es tarde si un día se pueden cerrar los ojos, vivos o muertos, para conseguir descansar en paz, vivos o muertos, en la memoria colectiva de una ciudad que les había olvidado. La Zamora de la verdad, justicia y reparación. La nuestra. La de todos los días. La de todos, ¡por fin! después de 81 años enterrados.

http://www.laopiniondezamora.es/opinion/2017/04/03/55-nombres-rescatados-cunetas-olvido/995797.html