El Camp de la Bota (Barcelona) urge a recuperar su dignidad y memoria
La construcción de un hotel ha hecho saltar las alarmas a entidades memorialistas e historiadores
Historiadores y entidades lanzan una recogida de firmas ante el temor de que la construcción de un hotel en la zona contribuya a caer en el olvido parte de la historia de este enclave de Sant Adrià
El Ayuntamiento se compromete a hacer un memorial que incluya diferentes espacios: el más relevante de estará en la zona verde del Campus Diagonal-Besòs de la UPC, lejos de donde se producían los fusilamientos
PAULA RUSSIÑOL, SANT ADRIÀ DE BESÒS
La construcción de un hotel en el Camp de la Bota ha hecho saltar las alarmas a entidades memorialistas e historiadores. El Ayuntamiento de Sant Adrià ya ha aprobado iniciar los estudios para que el grupo inversor ASG Iberia pueda construir allí un hotel de cinco plantas y más de 31.000 metros cuadrados.
“Tenemos miedo que la contrucción del hotel elimine cualquier referencia a los fusilamientos más allá de una pequeña placa”, lamenta el historiador y coordinador de ICV en Sant Adrià, José Luis Muñoz. En el parapeto del Camp de la Bota se fusilaron 1.734 personas, entre 1939 y 1952. Aunque, según el historiador, podrían ser más. De hecho, el espacio ya se utilizaba como lugar para ejecutar a los condenados mucho antes de la guerra civil. “Durante la República se fusilaron 44 militares golpistas que se levantaron contra el gobierno”, asegura el historiador. Después, el espacio fue el triste escenario de la represión franquista hasta la celebración del Congreso Eucarístico, que frenó las ejecuciones en la zona.
“¿Se imaginan ir a los campos de exterminio nazi de Mauthausen o Auschwitz y encontrarlos convertidos en un hotel de lujo y cientos de metros más lejos, para no molestar a los turistas, una reproducción tipo parque temático en homenaje a las víctimas?”. Esta es la pregunta que se hace Jose Luis Muñoz y que encabeza la campaña que ha iniciado para presionar al Ayuntamiento. La petición ya cuenta con más de 700 firmas.
Entidades memorialistas como la Associació Pro-Memòria als Immolats per la Llibertat a Catalunya también han mostrado su preocupación ante la posibilidad que el nuevo hotel pueda borrar el recuerdo de las personas que fueron asesinadas. Este medio ha intentado sin éxito contactar con los promotores de la obra.
¿Dónde ocurrieron los fusilamientos?
Según Muñoz, lo importante es hacer un memorial digno en el espacio exacto donde se producían las ejecuciones. Una localización que, según el alcalde de Sant Adrià de Besòs, Joan Callau, no es donde se erigirá el nuevo hotel. “Los fusilamientos se hacían en el muelle, en una zona que actualmente está en parte cubierta por el mar”, asegura el alcalde.
En este sentido, Muñoz admite que no está claro en qué lugar exacto del Camp de la Bota perecieron todas las víctimas de los juicios sumarísimos. Aún así, afirma que seguro que no tuvieron lugar en el espacio que hoy ocupa el Campus de la UPC, al otro lado de la Ronda Litoral, que es donde está previsto ubicar gran parte del memorial.“Me parece bien que quieran construir un museo, pero esto no impide dignificar la zona donde actualmente se ubica el panel informativo”, opina el historiador.
En su opinión, existe espacio suficiente para construir el hotel y un buen memorial. “Hay más de 2.000 metros cuadrados en el Camp de la Bota. Hasta el año 2017 siempre se había tenido en cuenta este lugar para ubicar el memorial, con la llegada de un inversor dispuesto a construir el hotel todo ha cambiado”, asegura Muñoz. Un horizonte que le hace rememorar otros momentos en los que tampoco se tuvo en cuenta la recuperación de la historia: “Con la construcción del Fòrum ya perdimos parte de la memoria de la zona”.
El alcalde de Sant Adrià de Besòs asegura que el año que viene se impulsará un concurso internacional para proyectar un memorial que incluya varios espacios de la zona. “Se colocarán y dignificaran elementos de homenaje en la UPC, el muelle, la Plaza del Fòrum y la Rambla Prim”, asegura el alcalde. Una cuestión que, según Callau, tiene el beneplácito de la mayor parte del pleno y diferentes entidades memorialistas consultadas.
“En Sant Adrià, consideramos muy importante la recuperación de la memoria histórica, como hemos demostrado con la construcción del Museo de la Inmigración o con el proyecto de dinamización del refugio antiaéreo”, afirma Callau.
