El Gobierno reactivará la exhumación de Franco y la conversión del Valle de los CaÃdos
El Ejecutivo no tiene concretado aún cómo dará un nuevo impulso a una cuestión en la que lleva trabajando años, si vÃa proyecto de ley o por decreto
La dirección del partido lo estudia este lunes
JUANMA ROMERO
El Gobierno de Pedro Sánchez se ocupará de una de las propuestas más simbólicas y señeras de su partido. La reforma de la Ley de Memoria Histórica. Llevar a término aquello que no pudo acometer José Luis RodrÃguez Zapatero cuando alumbró la norma, no sin dificultades, en 2007, y que ha sido vaciada de contenido en los años del PP en La Moncloa al dejar a cero su presupuesto. La permanente de la ejecutiva federal de este lunes, que se reúne por primera vez desde el aterrizaje en el poder de Sánchez, estudiará la reactivación de una propuesta icónica para el PSOE y para la izquierda y que, si se repiten los números que se dieron en el Congreso hace un año, podrÃa prosperar.
Quien levantó la liebre de las intenciones del partido y del Gobierno fue el secretario de Justicia y Nuevos Derechos de la dirección, el abogado valenciano Andrés Perelló. En los últimos dos dÃas anticipó, en sendos actos públicos en Burgos y Asturias, que en la cita de este lunes se abordarÃa la reactivación de la reforma de la Ley de Memoria Histórica, por el «compromiso importantÃsimo y prioritario» de la cúpula con ella. Una modificación de la legislación donde las exhumaciones sean polÃticas públicas, que supondrá la declaración de nulidad de todos los juicios del franquismo, se buscará la resignificación del Valle de los CaÃdos y se prohibirá la apologÃa del fascismo y de la dictadura. El paso adelante del PSOE incluye también la salida del cuerpo de Francisco Franco de la basÃlica y la reubicación del cadáver de José Antonio Primo de Rivera en un lugar menos preeminente que el actual.
Este domingo, tanto fuentes del partido como del Ejecutivo trasladaron que, en efecto, este es un «asunto clave» y prioritario, «aunque no urgente», y que se comenzará a estudiar en la ejecutiva de este lunes cómo impulsarlo. «El Ejecutivo trabaja para hacer cumplir la Ley de Memoria Histórica y estudia cada paso que debe darse para convertir el Valle en un lugar de reconciliacion y memoria de todos los españoles. Un Gobierno de todos y para todos no puede aceptar sÃmbolos de exaltación de una dictadura, condenada por la historia», subrayaban desde Ferraz.
El Ejecutivo «está estudiando las iniciativas legislativas que en este sentido han defendido tanto el PSOE como otros grupos parlamentarios»
Lo que está aún a debate es qué procedimiento empleará el Ejecutivo para reanimar una iniciativa que lleva coleando mucho tiempo en las Cortes. Ahora mismo no se descarta nada, indicaron fuentes del PSOE y de La Moncloa. Desde redactar un proyecto de ley —facultad del Gobierno, y con prioridad en la tramitación parlamentaria—, o bien aprobar los cambios vÃa real decreto ley, una fórmula más rápida pues entra en vigor tras su publicación en el BOE y solo requiere de la convalidación por el pleno del Congreso en el plazo de un mes. A falta de saber la concreción, desde Ferraz subrayaban que el Gabinete «está estudiando las iniciativas legislativas que en este sentido han defendido tanto el PSOE como otros grupos parlamentarios». Los socialistas solo disponen de 84 diputados en la Cámara, por lo que necesitan forzosamente de apoyos de otras formaciones para que la modificación del texto de 2007 pueda salir adelante.
El secretario de Justicia del PSOE anuncia una nueva ley de memoria histórica
Perelló se ha mostrado esperanzado con el nuevo gobierno de Sánchez y ha indicado que la nueva ley recogerá que «las exhumaciones tendrán que ser polÃticas públicas»
El ‘informe Jáuregui’ de 2011
Este es un tema muy trabajado por la dirección desde hace años, dado que el PP no hizo nada para desarrollarla y la dejó sin dotación presupuestaria. Incluso antes del acceso al poder de Mariano Rajoy habÃa trabajos preliminares sobre la necesidad de resignificar Cuelgamuros. El 28 de noviembre de 2011, con el Gobierno socialista en funciones, veÃa la luz el informe de la comisión de expertos sobre el futuro del Valle de los CaÃdos, encargado por el entonces ministro de la Presidencia, el hoy eurodiputado Ramón Jáuregui. En su recomendación número 31, los comisionados —salvo Miguel Herrero y RodrÃguez de Miñón, Pedro González-Trevijano y Feliciano Barrios— aconsejaban que los restos de Franco fuesen trasladados a un lugar elegido por la familia del dictador o, en todo caso, un emplazamiento «digno y más adecuado».
En mayo de 2017 una moción del PSOE para sacar a Franco de la basÃlica salió aprobada por amplÃsima mayorÃa: 198 votos a favor y 140 abstenciones
El informe de 2011 [aquà en PDF] fue la palanca para las iniciativas posteriores del PSOE, todas enterradas por la mayorÃa absoluta del PP o frenadas por el Gobierno de Rajoy en esta legislatura. Ya se adentraba en este camino en el programa de las generales. El 11 de mayo de 2017, apenas diez dÃas antes de la victoria de Pedro Sánchez en las primarias de su partido, el pleno del Congreso aprobaba, por 198 votos a favor (PSOE, Unidos Podemos, Ciudadanos, PNV, PDeCAT, CompromÃs, Bildu y Coalición Canaria) y 140 abstenciones (PP, ERC, Foro Asturias y UPN), una proposición no de ley de los socialistas que contenÃa, entre otras medidas, la aplicación, «de forma decidida y urgente», del informe de los expertos de 2011. Eso incluÃa reconvertir el Valle de los CaÃdos «para que deje de ser un lugar de memoria franquista y nacionalcatólica» y definirlo como «un espacio para la cultura de la reconciliación, de la memoria colectiva democrática, de dignificación y reconocimiento de las vÃctimas de la Guerra Civil y la dictadura». Se hablaba entonces, en aquella moción aprobada por el pleno, de trasladar los restos de Franco fuera de la basÃlica y el realojo del cuerpo de Primo de Rivera.
Tras la vuelta de Sánchez al trono de Ferraz, incluyó toda esa doctrina en la resolución polÃtica del 39º Congreso Federal, y después dio un paso más, y redactó una proposición de ley [aquà en PDF] que bebÃa de todos los textos anteriores, y tenÃa un planteamiento más ambicioso. AsÃ, proclamaba el carácter «radicalmente nulo de todas las condenas» del franquismo —un salto que nunca llegó a dar la norma de 2007 de Zapatero—; procedÃa a crear una Comisión de la Verdad; situaba la responsabilidad de buscar a los desaparecidos de la contienda y la dictadura en el Estado (es decir, el Gobierno central serÃa el competente a la hora de abrir las fosas y de elaborar mapas de localización de los desaparecidos); daba vida a un banco nacional de ADN para extraer, almacenar y gestionar muestras genéticas de todos los casos denunciados; otorgaba a los jueces la capacidad para investigar el robo de bebés para darlos en adopción; insistÃa en la retirada de sÃmbolos del franquismo; desplegaba medidas de concienciación en el ámbito educativo…
Y, lógicamente, la proposición de ley se ocupaba también del Valle de los CaÃdos, de su reconversión y de la salida del cuerpo de Franco y la reubicación del cadáver del fundador de la Falange. También incorporaba, en su disposición adicional primera, que «serán declaradas ilegales las asociaciones y fundaciones que públicamente fomenten, promuevan o inciten directa o indirectamente al odio, hostilidad, discriminación o violencia contras las vÃctimas de la Guerra Civil española y el franquismo por su condición como tales, o que realicen apologÃa del franquismo, fascismo y nazismo». AsÃ, se reclamaba la ilegalización de entidades como la Fundación Francisco Franco, defensora del legado del dictador.
En marzo de este año, el Gobierno del PP vetó una proposición de ley del PSOE muy ambiciosa, por lo que la iniciativa ni siquiera pudo debatirse
Ese texto, sin embargo, no llegó a pasar ni el primer filtro. El Gobierno del PP lo vetó, alegando que suponÃa un incremento del presupuesto. La propuesta, en consecuencia, no pudo ser debatida en el pleno para su toma en consideración y posterior tramitación. Decayó. Y por eso el PSOE se plantea ahora darle una nueva vida para hacer que salga adelante, aprovechando el cambio de color en La Moncloa.
La dirección, que se reúne este lunes a las 11 horas en Ferraz, y presidida por Sánchez ya convertido en jefe del Ejecutivo, analizará las distintas opciones y cuál es la más operativa. Pero reanimar una iniciativa muy simbólica para su electorado entra dentro de la polÃtica de gestos desplegada por el Gobierno, necesitado de visualizar desde el primer dÃa que encarna una forma de gestionar el poder muy diferente.
Del no del PP al sà del PNV… y la posición prudente de Ciudadanos
No sorprende el rechazo del PP a la iniciativa del PSOE, porque ya se opuso con fiereza en 2007 a la aprobación de la Ley de Memoria Histórica. De hecho, la vicesecretaria de Estudios y Programas de los populares, Andrea Levy, acusó al Gobierno de Pedro Sánchez de volver a la «confrontación» y la «tensión social» de la etapa de José Luis RodrÃguez Zapatero.
Para la dirigente conservadora, el PSOE, «siempre que gobierna», busca dar «esas batallas culturales» que «más allá de intentar provocar el frentismo no aportan nada». «La historia de la democracia española es de fraternidad y superación de los momentos más tristes, creo que mirar a nuestra historia nos hace sentirnos muy orgullosos de nuestro presente y de ese futuro de conciliación de consenso», subrayó Levy, informa EFE.
Los populares entienden que el Ejecutivo plantea «volver a la polÃtica de muchos hechos y pocos hechos». «Ya no es Zapatero, es Pedro Sánchez quien quiere volver a intentar hacer sociedades bipolares que ya están superadas», cuando los españoles «miran al futuro».
Mientras, la portavoz nacional de Ciudadanos, Inés Arrimadas, aseguró desde Barcelona que su partido está «abierto a sentarse» con el Gobierno del PSOE para «consensuar una solución» sobre el Valle de los CaÃdos, ya que «hay que pasar de una etapa de confrontación a una de reconciliación». La dirigente evitó adelantar el sentido del voto de Cs: la formación «ya se posicionará» cuando lo discuta el Congreso. Y eso que hace un año el partido de Albert Rivera apoyó, con Unidos Podemos, la iniciativa del PSOE. «Que Pedro Sánchez lo explique. Lo malo es que Sánchez lleva dos semanas escondido de los micrófonos y tenemos muchas preguntas», reprochó.