Muere el murciano Francisco Griéguez, el último superviviente español de Mauthausen
Conocido como el deportado nº 4.508, luchó en el ejército de la República y contra los nazis
LA CRÓNICA
Jueves, 21 de Junio de 2018
Griéguez, conocido como el deportado nº 4.508, luchó en el ejército de la República y tras su derrota se marchó a Francia donde hizo frente a los nazis. Ha fallecido en la ciudad francesa de Gardanne
Francisco Griéguez, uno de los murcianos que fueron deportados a los campos de exterminio nazis, falleció ayer miércoles a los 99 años de edad en la ciudad francesa de Gardanne. Griéguez, que nació en Murcia en 1918, estaba considerado el último de los supervivientes españoles del campo de concentración nazi de Mauthausen.
Griéguez, conocido como el deportado nº 4.508,luchó en el ejército de la República y tras su derrota se marchó a Francia donde también luchó contra los nazis desde una de las compañías de trabajadores españoles. Cuando estaba trabajando en las fortificaciones en la Línea Maginot francesa fue capturado por la Gestapo y enviado a Mauthausen.
Su testimonio se recoge en un reportaje de Carlos Hernández y Concha Esquinas en la web deportados.es. Recordaba Griéguez que «todavía ahora soñaba” con lo que vivió en el campo.
Según cuentan los que le conocieron, cuando trató de volver a la España de Franco su madre le escribió una carta diciéndole “si vuelves tendrás que dormir con tu padre, pues tus hermanas ya se han hecho grandes». Él entendió lo que, con mucha complicidad, le decía su madre. Si volvía le iban a matar porque su padre estaba muerto desde que era un niño.
Paco, como así le gustaba que le llamaran, consiguió volver a visitar su tierra natal una vez pasada la dictadura de Francisco Franco en España. El Ayuntamiento de Murcia tiene pensado inaugurar el próximo lunes un monolito en honor a los 85 vecinos de la ciudad que fueron deportados a campos de concentración. Francisco Griéguez, uno de los nombres que figurarán en la placa, no podrá vivir el homenaje a su lucha por sobrevivir en el horror nazi al haber fallecido pocos días antes de que se celebre el acto.
