Artículos y Documentos

El Consejo de Europa y la condena al franquismo
Emilio Sales Almazán - Talavera 27 de marzo de 2006


Hace unas fechas la Comisión Permanente de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa aprobó una iniciativa por la que se condena al régimen franquista y se propone convertir el día 18 de julio de 2006 como fecha internacional de condena del franquismo.

Las declaraciones laudatorias que ha producido en diferentes ámbitos son notorias y desde luego me uno a esta satisfacción por lo que puede de significar de apertura en la recuperación de la memoria colectiva de nuestro país.

Pero leyendo con detenimiento toda la declaración sería conveniente hacer una serie de precisiones sobre el contenido de esta resolución y desde luego que comparto el análisis que hace el Presidente de la Asociación “Caídos por la Libertad", Floren Dimas.

No conozco los vericuetos en que se mueven los organismos europeos, por ello no se como se ha desarrollado la gestación de este dictamen, lo que no me sorprende es que el ponente de este informe haya sido el diputado maltés del grupo socialista, D. Leo Brincat. Puede ser que se haya visto conveniente que el relator no sea del estado a quién se pretende reconvenir, pero dada la situación a la que estamos “acostumbrados" con la intervención de la justicia española sobre los crímenes de las dictaduras chilenas y argentinas, y la inhibición en los acaecidos por el régimen franquista, todo podría ser.

Lo que es indudable es que la Comisión europea ha dado “un tirón de orejas" al Estado español y a los diferentes gobiernos desde la llegada de la democracia. Hay elementos de crítica a esa inhibición, aunque como dice Dimas, están influenciadas por los puntos de vista de, al parecer, la única Asociación de Memoria Histórica que han dado “oídos", cuando además de otras muchas que existen y trabajan en nuestro país, están los informes NIZKOR o el de AMNISTÍA INTERNACIONAL.

Quizás la distancia (sin poner en duda las personalidades que han participado en la redacción, como Paul Preston) haga ver las cosas con una óptica confusa. La parte de las recomendaciones cuando dice “Desde el comienzo de los años 80, las iniciativas dirigidas a retirar de los lugares públicos los símbolos de la dictadura, como las estatuas, cambiar el nombre de las calles y colegios que llevan los nombres de Franco y sus generales, han sido coronado con el éxito", son bastante erróneas. Los que debemos bregar en el día a día con esta cuestión sabemos y padecemos el desprecio de las instituciones que, de manera caprichosa, ignoran las peticiones que se les hace. Bastaría hacer un recorrido por la página web del Foro por la Memoria y acceder a la sección “Limpia tus calles de fascismo", para comprobar lo mucho que queda por hacer. Sigue habiendo calles, plazas, estatuas, con alusiones al asesino y sus secuaces. Las administraciones hacen, en la mayoría de las ocasiones, algún movimiento táctico eliminando el nombre de una calle para ver de acallar la reivindicación, es sabido que no quieren “complicaciones" o “perder votos". Así lo demuestra (y contempla en el apartado 2 de la introducción de esta resolución) como se desmontó la estatua de Franco en Madrid por la noche y, no obstante, hubo intentos de impedirlo por miembros de la ultraderecha.

La Comisión Interministerial creada por el actual gobierno ha sido un fiasco, y de hecho la única conclusión es otorgar subvenciones a la medida con el único fin de “empañar" la memoria, puesto que exhumar a los asesinados es importantísimo, pero no se judicializa estas exhumaciones. Vitales cuestiones como las anulaciones de los juicios franquistas son olvidadas porque no “convienen". LA JUSTICIA NO TIENE PRECIO.

No obstante, las Conclusiones finales de este informe si deberían tenerse en cuenta.

A modo de información si me gustaría trasladar estas conclusiones para mejor conocimiento y demostración de lo poco que se ha hecho y lo mucho que queda por hacer.

*Hoy en día existen suficientes elementos que demuestran que la violación de los derechos humanos, numerosas y de gran amplitud han sido cometidas bajo el régimen franquista. Una verdadera toma en cuenta del pasado no puede limitarse a retirar símbolos de la dictadura aún presentes en los lugares públicos. Una seria evaluación del régimen franquista debe desembocar en una condena firme y sin ambigüedad.

*El informador considera necesario evitar todo retraso indebido y recomienda a las autoridades españolas aportar su apoyo moral y financiero a los grupos y asociaciones que buscan restablecer la memoria histórica de los ataques a los derechos humanos cometidos bajo la dictadura fascista.

*El Gobierno español debería incitar a crear una comisión nacional para investigar sobre las violaciones de los derechos humanos cometidos bajo la dictadura franquista e informar al Consejo de Europa de las conclusiones.

*Las autoridades españolas deberían permitir a los historiadores e investigadores acceder a la totalidad de los archivos públicos y privados, civiles y militares, susceptibles de contener documentos que puedan ayudar a establecer la verdad sobre la represión bajo el régimen franquista, especialmente el de la fundación Franco financiada por el Estado, y abrir todos los archivos fascistas que siguen todavía inaccesibles al público.

*El Gobierno español debe participar del total apoyo de la comunidad internacional para localizar y abrir fosas comunes, evaluadas en más de una centena, y donde han sido enterradas en los años 30 las víctimas de los escuadrones de la muerte franquista.

*El Gobierno español, debe incitar a crear una Comisión de historiadores para restablecer los hechos, retomar la enseñanza de la guerra civil en los colegios y considerar la puesta en la enorme basílica subterránea del Valle de los Caídos a las afueras de Madrid, donde Franco está enterrado, de una exposición permanente que muestre como esta basílica ha sido construida por los presos republicanos.

*Los ciudadanos españoles que han sido víctima del régimen franquista, o sus descendientes y sus familias, deben ser animados a testimoniar ante las dos comisiones.

*Las instituciones españolas deben continuar eliminando los monumentos, nombres de las calles, placas conmemorativas y otros signos exteriores que rinden homenaje a la dictadura franquista, así como a los defensores y a los principales autores de la represión.

*El informador propone recomendar al Comité de Ministros del Consejo de Europa la adopción de una declaración oficial dirigida a condenar el régimen franquista a nivel internacional y promover uno o varios monumentos a la memoria de las víctimas del franquismo en la capital española y en las otras ciudades importantes de España.

Todas estas recomendaciones y resoluciones son una parte de las exigencias que se deben unir a las ya planteadas por las diversas asociaciones y organizaciones que trabajan en el movimiento por la recuperación de la Memoria. Estas exigencias deben de ser asumidas por los responsables políticos, aunque alguno de ellos, con altas responsabilidades haya declarado ser un presidente del futuro y estas cosas son del pasado. Le falta talento y… talante.

Talavera 27 de marzo de 2006

Emilio Sales Almazán

Responsable del Foro por la Memoria en Castilla La Mancha