D. Santiago López, Profesor de Historia de la Universidad de Salamanca y presidente fundador de la Asociación Salamanca Memoria y Justicia .
Juan Antonio no ha comprendido la situación real de impunidad. No conozco historiador que haya puesto los nombres de los verdugos que, estando vivos los descendientes, no haya sufrido desde requerimientos judiciales hasta respuestas ignominiosas en la presa. Es cierto que dichos juicios suelen terminar bien cuando el encausado demuestra que hay un documento en un archivo que demuestra su aseveración. Pero nadie le quita los meses de susto, los sinsabores de la prensa y las llamadas de teléfono.
Pues todo esto pasa porque el legislativo es incapaz de retirar la Ley de Amnistía del 77, que hace posible que los antiguos verdugos sea tan ciudadanos honorables como la abuela de Juan Antonio.
Todo esto es posible porque el poder judicial no ha emitido sentencia alguna contra nada franquista, apoyándose en el edificio de normas, decretos y leyes como la de Amnistía del 77 que hacen que todo el aparato judicial opere como si fuera una gigantesca ley de punto final. Por último, la prueba del nueve: ¿por qué no hay un libro de un historiador español que derechas e izquierdas entiendan como una síntesis razonable de aquellos acontecimientos? Porque no se puede hacer hasta que decir la verdad no te cueste un juicio. La impunidad es nuestra mordaza
Santiago López.
Profesor de Historia. Universidad de Salamanca