Asturias. Muere Manuel Zapico, 'El Asturiano', uno de los últimos maquis
elcomerciodigital.com - 31 de agosto de 2004

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MARIO VILLAR/GIJÓN

Manuel Zapico, apodado 'El Asturiano', murió el pasado sábado en París a los 79 años de edad. Era uno de los últimos supervivientes de la guerrilla que luchó contra la represión franquista en el Principado. Zapico también llegó a ser muy popular en varios pueblos del Bierzo, en León, en los que ayudó a salir adelante a un buen número de familias republicanas perseguidas por el ejército del general Franco.

En un comunicado difundido ayer, Izquierda Unida expresó su pesar ante la pérdida de este minero que a los 15 años militaba en el Partido Comunista y que fue «uno de los pocos supervivientes de la guerrilla asturiana que luchó contra la dictadura».

Tenía sólo 12 años cuando las tropas del dictador entraron en Asturias. Corría el año 1937 y su familia actuaba como enlace y apoyo para las actividades de los guerrilleros. Zapico, de familia republicana represaliada durante la dictadura, comenzó a los quince años a trabajar en una explotación minera de Sama de Langreo y a organizar sabotajes desde los primeros años de la posguerra.

En plena adolescencia, Manuel decidió seguir la lucha y se fue con los guerrilleros para enfrentarse al ejército franquista. Zapico formó parte de la Federación de Guerrilleros de León y Galicia, creada el 17 de julio de 1942. La asociación, formada por anarquistas, comunistas y socialistas, permaneció viva hasta la salida hacia Francia de los socialistas asturianos, en 1948.

Exilio sin retorno

En 1952, Manuel Zapico cruzó la frontera hacia Francia donde fue capturado y deportado a España, pero consiguió huir arrojándose de un tren en marcha. Con su muerte este fin de semana en la capital francesa, su exilio resultó definitivo y sin retorno. Precisamente, ese es uno de los motivos de tristeza de muchos de sus compañeros, que pierden a uno de los históricos baluartes de la izquierda asturiana.

Para Izquierda Unida, su muerte «supone una importante pérdida de parte de la historia reciente de España» y su impronta «queda reflejada como símbolo de la lucha por la libertad». Zapico formaba parte de la Asociación Archivo Guerra y Exilio (AGE), cuyos miembros se desplazaron el domingo a París para acompañar en estos momentos a la familia del guerrillero.

Pese al cambio que supuso la llegada de la democracia, Zapico declaró en varias ocasiones que las reivindicaciones de su lucha siguen ahí, en el aire, sin un reconocimiento efectivo.