Inaugurado en la plaza de Adrià un monumento a Carrasco i Formiguera, fusilado por Franco (Barcelona)
El Periódico de Catalunya - 17/09/2003

Raimon y Mercè, hijos de Carrasco i Formiguera, ante la escultura. Foto: SERGIO LAINZ

Su autor propone un espacio de reflexión

ROSARIO FONTOVA
BARCELONA

La memoria histórica vuelve a una calle de Barcelona. Un monumento en la plaza Adrià recuerda desde ayer al político democristiano Manuel Carrasco i Formiguera, fusilado en 1938 en el penal de Burgos por los sublevados franquistas. Su autor es el escultor de Girona Pep Admella, que ha proyectado un espacio de reflexión junto a la transitada calle de Muntaner.
El elemento más visible consiste en un cubo de acero inoxidable donde está grabada la palabra en alemán Die Raum (El espacio). El cubo, una tentación para los grafiteros, lleva una variación de tres grados, lo que lo convierte en un hexaedro 'para humanizar la forma geométrica' según Admella.

Un puzle
Junto al cubo, el artista ha desmontado una frase extraída de las cartas escritas a la familia desde la prisión por Carrasco i Formiguera. En una serie de losetas incrustadas en el pavimento pueden leerse las palabras Catalunya, España, Llibertat, pero para componer el puzzle completo hay que entretenerse un rato.
Pep Admella ha trabajado en el proyecto durante dos años a causa de los requisitos de la comisión de esculturas del ayuntamiento. El artista propuso suprimir una gran jardinera situada hacia la calle de Muntaner. Esta supresión permite despejar la plaza y deja más a la vista una fuente modernista. La mayor virtud de la intervención, por encima de sus cualidades formales, radica en que se gana un fragmento de espacio público hasta ahora inutilizado. En 1938, tras la ejecución sumaria del político, se puso la primera piedra de un monumento en su recuerdo, proyecto que la guerra civil truncó, en el mismo lugar donde ayer familiares, amigos y políticos democristianos asistieron a la inauguración del nuevo. Entre los asistentes, el alcalde de Barcelona Joan Clos; el conseller de Governació Josep Maria Pelegrí y Josep Antoni Duran Lleida, ambos de Unió Democràtica.