Hoy es un día de fiesta para la Falange o para Manos Limpias pero lo más grave es que sea también un día de alborozo en las sedes del PP

 

RODOLFO IRAGO / CADENA SER

Hoy es un día de fiesta para la Falange o para Manos Limpias pero lo más grave es que sea también un día de alborozo en las sedes del PP

Algo hemos hecho muy mal en este país para que la ultraderecha haya conseguido apartar de la Audiencia Nacional al único juez que ha querido investigar los crímenes del franquismo.

Hoy es un día de fiesta para la Falange o para Manos Limpias pero lo más grave es que sea también un día de alborozo en las sedes del PP. Los dirigentes de este partido, con Trillo a la cabeza, han participado con fruición en esta cacería al juez que haciendo bien su trabajo había descubierto la Gürtel, el mayor escándalo de corrupción de la democracia española. Ya dijo esta semana el procesado presidente Camps, el nuevo Juan Sin miedo, que de la cacería ya habían caído dos: Bermejo y Garzón.

Trillo, que sigue en política a pesar de su vergonzoso papel en el Yak-42, ha dirigido una legión de abogados para atacar por tierra, mar y aire a Garzón. Lo más duro y decepcionante ha sido además comprobar que en el Supremo, Luciano Varela y otros han puesto por encima de todo sus ganas de vendetta y han ayudado a la ultraderecha a conseguir sus objetivos.

En el Supremo han despreciado el simbolismo nacional e internacional de procesar a un juez que sin duda se ha ganado a pulso su fama de polémico pero que ha demostrado también que cuando ha tenido que jugarse el tipo se lo ha jugado ante el poder, ante los dictadores, los narcotraficantes y los terroristas.

El remate de esta historia tan lamentable ha sido el papel de los vocales conservadores del CGPJ que ni siquiera han querido que la suspensión fuera acompañada del permiso a su traslado a la Corte Penal Internacional.

Demasiadas ganas de venganza, demasiados egos juntos.

http://www.cadenaser.com/espana/articulo/demasiadas-ganas-venganza/csrcsrpor/20100514csrcsrnac_6/Tes