El Parlamento vasco insta a que se retire el escudo franquista del edificio de Hacienda en Bilbao
Unanimidad en la cámara vasca para eliminar los símbolos preconstitucionales de los edificios y calles de Euskadi
VITORIA | VASCO PRESS
HABRÁ «CASTIGO» ADMINISTRATIVO PARA QUIEN SE NIEGUE
Los partidos políticos han aprobado hoy por unanimidad en el Parlamento vasco una iniciativa a favor de la retirada de símbolos vasco la elaboración de un catálogo de este tipo de símbolos y que colabore económicamente con los ayuntamientos para llevar a cabo este trabajo. La medida afecta a escudos preconstitucionales como el de la fachada de la Delegación Provincial de Hacienda en la Plaza Moyúa de Bilbao el de la Catedral Nueva de Vitoria.
Este debate ha tenido lugar a raíz de una iniciativa parlamentaria de Aralar para avanzar en el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica a la que habían presentado enmienda de totalidad PNV y PSE. El contenido de las tres propuestas era muy similar y sólo presentaban diferencias de matiz y, de hecho, los tres grupos han consensuado en el transcurso de la sesión plenaria un texto que ha recibido además el apoyo de PP, EA, EB y UPyD.
La resolución aprobada por unanimidad pide en primer al Gobierno vasco que elabore en colaboración con los ayuntamientos un catálogo de escudos, insignias, placas u otros objetivos que «supongan exaltación personal o colectiva de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura», y ponga este informe a disposición de la Asociación de Municipios del País Vasco (Eudel).
La Cámara de Vitoria reclama a continuación al Ejecutivo del PSE que constituya con Eudel una comisión técnica para realizar una valoración económica y definir un plan para retirar los símbolos franquistas con la participación económica de ambos niveles institucionales.
El último punto de la resolución defiende el «castigo» administrativo a aquellos ciudadanos particulares que se nieguen a retirar de los edificios o espacios de los que son propietarios los citados símbolos. El «castigo» consistirá, según reza el acuerdo, en «retirar subvenciones o todo tipo de ayudas públicas del Gobierno Vasco a los propietarios particulares que se nieguen a retirar los elementos referidos».
La unanimidad en la votación ha llevado como es lógico a que las intervenciones en el debate hayan sido básicamente coincidentes. Todos han defendido la necesidad de cumplir la Ley de Memoria Histórica y retirar de las calles y edificios de los pueblos y ciudades de Euskadi símbolos ligados a un régimen dictatorial que, además, pueden resultar ofensivos para las personas que sufrieron directamente su represión.
«No podemos permitir que en nuestras calles y plazas permanezca simbología que enaltece un régimen dictatorial que ha sido condenado por la historia, por el derecho internacional, por el Consejo de Europa en 2006 con motivo del sesenta aniversario del golpe franquista», ha sostenido el parlamentario socialista Mikel Unzalu.
En la misma línea, el parlamentario de Aralar Dani Maeztu ha considerado «inaceptable» que «se ensalce» al régimen franquista en algunos espacios públicos, mientras que el popular Carmelo Barrio ha explicado que apoyan la resolución «como expresión del cumplimiento de la ley». Barrio, eso sí, ha pedido que se tenga en cuenta que la ley establece como excepción aquellos edificios u obras protegida por su carácter artístico, arquitectónico o histórico.
Algunos de los símbolos que podrían ser retirados por los ayuntamientos en colaboración con el Gobierno vasco son algunas placas del antiguo Instituto Nacional de la Vivienda ubicadas en barrios obreros de varias localidades que contienen el yugo y las flechas que Franco adoptó en homenaje a los Reyes Católicos, o varios escudos preconstitucionales que se mantienen en algunos edificios.
