Galería Fotográfica del Foro por la Memoria de la Comunidad de Madrid

 

Las asociaciones de la memoria y familiares de víctimas del franquismo buscan fórmulas para acabar con la impunidad de los crímenes de la dictadura

“El futuro de la memoria está en Sol”, asegura el representante de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica

Las diversas asociaciones de la memoria que participaron ayer en el debate La memoria y asociaciones coincidieron ayer en reconocer la necesidad de anular la Ley de Amnistía, que sirvió no sólo para liberar a los demócratas detenidos en las cárceles franquistas, sino que se ha convertido en el principal obstáculo para la investigación de los crímenes de la dictadura. Así se expresaron los participantes en el debate Memoria y asociaciones, en la tercera sesión de las II Jornadas Políticas de Memoria y Construcción de Ciudadanía, que organizan la Fundación Contamíname para el Mestizaje Cultural y la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) y que fue moderado por el profesor de Ciencia Política en la Universidad Complutense de Madrid, Pablo Iglesias Turrión.

Sin embargo, la valoración completa de la ley difiere entre los portavoces que participaron en el debate, desde la consideración de que la Ley de Amnistía supuso una auténtica “ley de punto final”, según expresión de José María Galante, del colectivo La Comuna, que agrupa a ex presos del franquismo, o su calificación como “un insulto” para las víctimas del franquismo, según dijo Ángela Fernández, familiar de víctimas de la dictadura, hasta las interpretaciones que, a pesar de rechazar actualmente su contenido, explican que “la ley se le haya colado a la izquierda” durante la Transición –según Cecilio Gordillo, de la asociación Recuperando Memoria de la Historia Social de Andalucía- porque “así era la correlación de fuerzas entonces y ésa es la paradoja entre lo necesario y lo probable”, según Ludivina García, presidenta de la asociación de Descendientes del Exilio Español.

“La izquierda descubrió hace poco que la Ley de Amnistía era una ley de punto final”; aceptarla “fue uno de los grandes errores” de la izquierda en la Transición, aseguró José María Pedreño, de la Federación Estatal de Foros por la Memoria, afirmaciones que fueron rebatidas por Galante, quien recordó que esa valoración negativa de la ley ya la hicieron colectivos de izquierda cuando se negociaba la Transición. Galante sentenció que “lo de menos en esa ley son los presos que salen de las cárceles; lo demás es el aparato policial y la judicatura que quedó intacto tras cuarenta años oprimiendo a nuestro pueblo”.

Acabar con la impunidad es una tarea difícil, después de lo sucedido con el juez Garzón. Para la ARMH, la posibilidad se abre en el terreno internacional, gracias al principio de Justicia Universal, lo explicó Carlos Agüero, quien destacó que la asociación ha iniciado acciones legales en Argentina.

Por su parte, José María Pedreño explicó que la Federación de Foros por la Memoria está promoviendo acciones judiciales contra cuatro soldados nazis del campo de concentración de Mathausen, con la confianza de evidenciar mostrar la paradoja de que sí se puede juzgar y castigar a los nazis por lo que hicieron a presos españoles en este campo, mientras que no se puede juzgar a quienes hicieron lo mismo en España. Otra opción podría ser “crear una Fiscalía del Estado y un tribunal especial” para juzgar los crímenes del franquismo, propone José María Galante en nombre de La Comuna.

Memoria y presente

“El futuro de la memoria está en Sol”, concluyó ayer el debate Carlos Agüero después de que los seis portavoces valoraron de manera desigual las carencias y errores de la Transición, las limitaciones de la Ley de Memoria Histórica y la incapacidad de las industrias culturales, de los medios de comunicación, de los intelectuales y del mundo de la cultura para participar en la construcción de una memoria digna, precisa y certera de lo que ocurrió en España durante la II República, la guerra civil, el franquismo y la transición y su influjo en el presente.

“… Ese futuro estaría en Sol si la plaza amaneciera con la bandera republicana”, puntualizó Pedreño, mientras que Cecilio Gordillo confía en que “los jóvenes sabrán ponernos en el lugar que nos corresponda”, aunque el vínculo entre memoria y presente sólo podrá saldarse de forma positiva si se resuelve la cuestión de la impunidad, según Galante.

Prensa Contamíname

Verónica Alemán