Federación Foros por la Memoria
Comunicados y Documentos de la Federación
Noticias
Agenda
Artículos y Documentos
Home » Artículos y Documentos, Federación Foros por la Memoria

Memoria Histórica en España: Cuando se profana la tumba de víctimas del franquismo

Conrado Granado: Periodistas-es, 08-06-2011 | 10 agosto 2011

Hay quien no quiere olvidar que sus seres queridos fueron un día fusilados, y sus restos arrojados a campos, caminos y veredas

 

LUNES 08 DE AGOSTO DE 2011

CONRADO GRANADO VECINO

Si alguien oye la frase de “Profanadores de tumbas” pudiera pensar que se trata de una película dirigida por Mike Méndez en el año 2006, pero lo triste del caso es que esa frase podría aplicarse en algún hecho que ha sucedido en un pueblo de esta España mía, esta España nuestra, con unas consecuencias todavía impredecibles, porque hay personas a las que la Memoria Histórica no les gusta, más bien les disgusta, mientras que otros quieren un respeto a los restos de sus seres queridos. El penúltimo caso lo tenemos en la profanación de una tumba donde se honraba los restos de diez víctimas del franquismo, a iniciativa del alcalde del Partido Popular del abulense pueblo de Poyales del Hoyo, según se recoge en diversos medios de comunicación, con unos titulares que hablan por sí solos. Así, para el diario Público, “El alcalde profanó una tumba donde se honraba a diez víctimas del franquismo”. Para El País, “En Poyales del Hoyo no quieren Memoria Histórica”. El Mundo afirma que “Las dos Españas se enfrentan en Poyales del Hoyo”, mientras La Razón concluye que “La memoria Histórica provoca un enfrentamiento en un pueblo de Ávila”.

Todo comenzó cuando trasladaron los restos de 10 fusilados de Poyales a una fosa anónima por mandato del alcalde obviando un informe que le obligaba a avisar a las familias, afirma desde el Foro de la Memoria, Eduardo de la Torre, mientras que el alcalde, Antonio Cerro, del Partido Popular, afirma que sí lo hizo. Sea, como fuere, lo que subyace detrás de todo este asunto es que para una seria de españoles, para una parte de la sociedad la Memoria Histórica tiene sentido por respeto a esa parte de nuestra historia que durante tantos años se nos ha robado, ocultado, mientras que para otros es una antigualla que es mejor olvidar. Pero hay quien no quiere olvidar que sus seres queridos fueron un día fusilados, y sus restos arrojados como si de alimañas se tratara a campos, caminos y veredas de nuestra geografía. Fueron miles, decenas de miles, y su recuerdo y memoria merecen un respeto, si de verdad queremos enterrar definitivamente la herida de aquella España fratricida.

Sobre todo, cuando leemos el “delito” por el que algunas personas fueron fusiladas por el Régimen franquista, Régimen que todavía no ha sido juzgado. “Madre decía que la mataron por estar liada con un socialista. Como tenía la suerte de saber leer, leía la prensa que pillaba y entre los periódicos que leía al resto de mujeres mientras cosían estaba El Socialista”, afirmaba a Público Obdulia Camacho, quien recordaba la madrugada del 28 de diciembre de 1936, cuando un grupo de falangistas la subieron a un camión junto a su madre cuando ella contaba 12 años, y se salvó gracias a la mediación del conductor un kilómetro antes de llegar al lugar de fusilamientos. Eran tiempos de la Falange, la siniestra guardia pretoriana de Franco, uno de cuyos miembros, apodado “El 501”, se enorgullecía de haber matado a tantas personas como apostillaba su mote.

Han pasado 75 años desde aquel triste año 1936 en el que un militar levantado en armas contra el Gobierno de la República empezó a imponer un Régimen dictatorial que duraría 40 años, pero a tenor de lo oído y leído en los últimos días, todavía quedan pavesas de aquella hoguera de dolor y odio que engendró dicho levantamiento. A los asistentes a una concentración contra la decisión del alcalde de trasladar los restos de los fusilados a una fosa común se les tildó de “putos rojos”, mientras que unas chicas que portaban una pancarta del 15-M del Valle del Tiétar en la que podía leerse “Somos los nietos de los obreros a los que no pudisteis fusilar”, fueron agredidas, golpeadas y empujadas. La guinda a este sinsentido la puso un vecino al parecer nostálgico del pasado, que les gritaba enfurecido: “Si franco levantara la cabeza, os cortaba el cuello”. No estamos en 1936, esto es España, año 2011, y la cosa sucedió en un pueblo de Ávila llamado Poyales del Hoyo.

http://www.periodistas-es.org/memoria-historica/memoria-historica-en-espana-cuando-se-profana-la-tumba-de-victimas-del-franquismo