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Campanadas a muerto

Emilio Sales, 15 de enero de 2012 | 16 enero 2012

Lluis LLach compuso una obra titulada «Campanadas a muerto» en memoria de los 5 trabajadores asesinados en Vitoria

 

El 3 de marzo de 1976 fueron asesinados 5 trabajadores en Vitoria por la acción brutal de la policía. El ministro de interior era el demócrata Fraga Iribarne (llamado también frega y barre). Lluis LLach compuso una obra titulada «Campanadas a muerto» en Memoria de aquella acción criminal. Sus versos dicen así:

 

I

Campanadas a muerto

lanzan un grito para la guerra

de los tres hijos que han perdido

las tres campanas negras.

 

Y el pueblo se recoge

cuando se acerca el lamento;

son ya tres penas más

para nuestra memoria.

 

Campanadas a muerto

por las tres bocas cerradas;

¿ay de aquel trovador

que olvidara las tres notas!

 

¿Quién segó el aliento

de aquellos cuerpos tan jóvenes

sin otro tesoro

que la razón de los que lloran?

 

Asesinos de razones y de vidas,

que nunca tengáis reposo a lo largo de vuestros días

y que en la muerte os persigan nuestras memorias.

 

Campanadas a muerto

lanzan un grito para la guerra

de los tres hijos que han perdido

las tres campanas negras.

 

II

Abridme el vientre

para su reposo,

de mis jardines

traed las mejores flores.

 

Para estos hombres

cavadme hondo

y en mi cuerpo

grabad sus nombres.

 

Que ningún viento

perturbe el sueño

de quienes han muerto

sin humillar la cabeza.

 

III

Diecisiete años, solo,

y tú tan viejo;

celoso de la luz de sus ojos

has querido cerrar sus párpados

pero no podrás, porque todos guardamos esta luz

y nuestros ojos serán relámpagos para tus noches.

 

Diecisiete años, solo,

y tú tan viejo;

envidioso de una belleza tan joven

has querido desgarrar sus miembros

pero no podrás, porque recordamos su cuerpo

y cada noche aprenderemos a amarlo.

 

Diecisiete años, solo,

y tú tan viejo;

impotente para el amor que él tenía

le has dado la muerte por compañera

pero no podrás, porque por todo aquello que él amó

nuestro cuerpo estará siempre en primavera.

 

Diecisiete años, solo,

y tú tan viejo;

envidioso de una belleza tan joven

has querido desgarrar sus miembros

pero no podrás, porque todos guardamos esta luz

y nuestros ojos serán relámpagos para tus noches.

 

IV

La miseria se hizo poeta

y escribió en los campos

en forma de trincheras

y los hombres marcharon hacia ellas.

Cada uno fue una palabra

del victorioso poema

http://espermatozoiderojo.blogspot.com/2012/01/campanadas-muerto.html