Los secretarios judiciales temen que la causa contra Garzón disuada a otros jueces de aplicar las leyes
El sindicato de secretarios Judiciales se solidariza con Garzón y sostiene que el magistrado se limitó a aplicar tratados internacionales
JAVIER ÁLVAREZ
Los secretarios Judiciales sostienen que el magistrado se limitó a aplicar tratados internacionales y normas de carácter supranacional que autorizan a perseguir los crímenes franquistas y dar respuesta a las asociaciones «que pidieron un reposo digno para sus familiares»
El sindicato de secretarios judiciales ha expresado en un comunicado su adhesión a las muestras de apoyo al juez y reivindican la independencia judicial como garantía y derecho de la ciudadanía.
Para este colectivo los procesos abiertos contra Garzon se deberian haber resuelto mediante «el régimen de recursos, ordinarios y extraordinarios como medio para enmendar cualquier aplicación incorrecta de la ley por parte de Jueces y Tribunales. Pero todo lo que va más allá supone un quebranto a la esencia que se preconiza para el tercer poder del Estado».
Este colectivo comparte el temor expresado por la Comisión Internacional de Juristas, de que el «proceso iniciado contra el Magistrado Baltasar Garzón pueda tener un efecto intimidatorio en la investigación de otros crímenes contra la humanidad tanto a nivel estatal como internacional».
Comunicado íntegro del sindicato de secretarios judiciales:
Desde el Sindicato de Secretarios Judiciales (SISEJ) queremos mostrar nuestra adhesión a las distintas muestras de solidaridad que desde numerosos colectivos de nuestra sociedad se están produciendo estos días en torno a los dos últimos procedimientos penales a los que se ha sometido al Magistrado Baltasar Garzón. Como juristas integrados en la Administración de Justicia de un Estado de Derecho Queremos reivindicar el papel de la independencia judicial como garantía y derecho de la ciudadanía, y el régimen de recursos, ordinarios y extraordinarios como medio para enmendar cualquier aplicación incorrecta de la ley por parte de Jueces y Tribunales. Pero todo lo que va más allá supone un quebranto a la esencia que se preconiza para el tercer poder del Estado.
Lejos de realizar un ataque a las decisiones del Tribunal Supremo, al que respetamos como órgano máximo de la jurisdicción, salvo la constitucional, no podemos olvidar los numerosos Convenios Internacionales suscritos por nuestro país, normas de carácter supranacional que obligan a los Estados que en su día los firmaron y que enarbolan aquellas asociaciones que pidieron en su día un reposo digno para sus familiares, víctimas de la contienda que enfrentó a los españoles.
No deja de llamar nuestra atención que otras organizaciones y asociaciones del ámbito de la justicia, tan beligerantes en los supuestos donde se ha objetado la actuación de cualquier juez, guarden ahora silencio, cuando se está cuestionando, no una negligencia profesional, sino las decisiones adoptadas en el seno de un acto hoy por hoy estrictamente jurisdiccional, como es la instrucción.
Para que los ciudadanos sigan confiando en la justicia como máxima garantía de sus derechos, el SISEJ considera imprescindible que no se produzcan situaciones como la que ahora vivimos; siendo igualmente necesario para que Jueces y Tribunales puedan aplicar la Ley con libertad e independencia.
Finalmente el SISEJ teme, Como ha manifestado la Comisión Internacional de Juristas, que el proceso iniciado contra el Magistrado Baltasar Garzón pueda tener un efecto intimidatorio en la investigación de otros crímenes contra la humanidad tanto a nivel estatal como internacional.
