Universidad Complutense: Promotores de la Memoria Histórica, a favor del cierre de capillas
Otero Carvajal, decano de Geografía e Historia, también impulsó el ilegal monumento a las Brigadas Internacionales en la UCM, inaugurado por Carrillo
Luis Enrique Otero Carvajal, decano de la Facultad de Geografía e Historia y representante de José Carrillo, rector de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), en las negociaciones para el cierre de las capillas universitarias y la supresión de la Pastoral Universitaria, tiene una larga trayectoria ideológica y de imposición de criterios partidistas en la gestión universitaria. Otero ha sido uno de los más firmes defensores de la institucionalización de la Memoria Histórica en el ámbito universitario, hasta el punto de ser el mayor promotor de la Cátedra de Memoria Histórica del Siglo XX, que ha alcanzado un gran desarrollo en la facultad que dirige.
Fuentes universitarias consultadas por LA GACETA no han dudado en señalar que fue uno de los principales promotores del monumento a las Brigadas Internacionales levantado en la UCM e inaugurado por Carrillo. Un monumento que ha sido declarado ilegal recientemente por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).
Uno de los principales apoyos que ha tenido Otero en esta campaña de promoción del pensamiento marxista en la UCM es el actual decano de la Facultad de Ciencias Políticas, Heriberto Cairo Carou, que justificó los primeros asaltos a las capillas universitarias en abril de 2011 como “una expresión de la pluralidad de creencias religiosas, tendencias políticas e ideologías existentes en el centro”.
En el campus de Somosaguas en el que se ubica Ciencias Políticas se encuentra la sede de la Asociación de Estudiantes Contrapoder, una de las más activa en la gestación y organización de las protestas del 15-M, que ha sido sistemáticamente protegida por Cairo.
A la facultad que dirige pertenece la actual Vicerrectora de Atención a la Comunidad Universitaria, Cristina Velázquez, quien también se ha manifestado contraria a la presencia de elementos religiosos en el campus.
Las fuentes universitarias consultadas por este diario no han dudado en señalar que el momento elegido para la presentación de este problema y el inicio de las negociaciones no es casual. La gestión del rector Carrillo está siendo muy cuestionada por la mala situación económica que vive la Complutense. La falta de financiación y la negativa de la comunidad a aceptar las cuentas presentadas por el equipo rectoral quedarían así ocultas tras un conflicto que desviará la atención de los medios de comunicación y de los alumnos y el personal docente del centro.
Todo apunta a que el proceso de radicalización iniciado por el anterior rector, Carlos Berzosa, en su etapa al frente de la mayor universidad de España, será completado por el hijo del histórico dirigente del comunismo español.
