Los familiares de víctimas del franquismo llaman a ‘bailar’ la exhumación de Franco
A las 20.00 han convocado una concentración de celebración bajo el hashtag #AMoverElEsqueleto en la Puerta del Sol
“Cuando murió Franco en 1975 mucha gente no lo pudo celebrar públicamente. Ahora queremos salir a la calle a decir que la exhumación es un triunfo”
La exhumación de los restos del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos se producirá finalmente este jueves y los familiares de las víctimas del franquismo no quieren dejar que pase la ocasión sin celebrar este “triunfo” democrático. La Federación Estatal de Foros por la Memoria y el Foro por la Memoria de la Comunidad de Madrid llaman a toda la ciudadanía a celebrarlo en las plazas más significativas de las localidades de todo el país a las 20.00 de la tarde del jueves, bajo el hashtag #AMoverElEsqueleto. A esa misma hora han convocado una concentración central en la Puerta del Sol de la capital.
“Cuando murió Franco en 1975 mucha gente no lo pudo celebrar públicamente. Ahora queremos salir a la calle a decir que la exhumación es un éxito, un triunfo y que nos alegramos”, ha indicado a este medio Arturo Peinado, presidente de la Federación de Foros por la Memoria. “Cada día que el dictador ha permanecido enterrado en un lugar de honor, en el mausoleo construido conforme a sus designios y financiado por toda la ciudadanía, incluidos los familiares de sus cientos de miles de víctimas, ha constituido una infamia y un insulto a la democracia y a la inteligencia”, han explicado los memorialistas.
En concreto, en Madrid la celebración coincidirá con el final de la manifestación de los jueves de la Plataforma contra la Impunidad del Franquismo, que lleva más de nueve años manifestándose todas las semanas en la Puerta del Sol de 19.00 a 20.00 de la tarde. El lugar de la protesta elegido es frente al edificio histórico de la Comunidad de Madrid, antigua sede de la Dirección General de Seguridad, en cuyos sótanos la Policía franquista sembró el terror mediante torturas y asesinatos.
A las 10.30 de este jueves dará comienzo la exhumación y posterior inhumación de Franco. Según ha informado el Gobierno, los restos del dictador serán trasladados al cementerio municipal de El Pardo-Mingorrubio. El Ejecutivo baraja como primera opción que el traslado se realice en helicóptero, si es que el tiempo lo permite. En caso contrario, se realizará por otras vías.
Los trabajos técnicos se realizarán con máxima discreción. Una carpa cubrirá la tumba de Francisco Franco para evitar que se difunda cualquier imagen sobre el procedimiento. A esta podrán acceder tan solo dos familiares, de los 22 que estarán presentes (nietos, cónyuges y bisnietos). Además, en la entrada se instalará un detector de metales y un escáner para que nadie pueda tomar imágenes ni captar sonidos de la exhumación en la Basílica del Valle.
Los restos del dictador están en una caja de zinc sellada que probablemente no se abrirá, ya que es posible que se conserve en perfecto estado y ya el notario mayor del Reino dio fe de que allí se había introducido el cuerpo de Franco. El prior del Valle de los Caídos, Santiago Cantera, que ha tratado de impedir por todos los medios la exhumación, bendecirá los restos cuando salgan de la carpa, aunque no se permitirá cubrir el ataúd con la bandera española ni rendir honores al dictador. Ya en Mingorrubio, se realizará una polémica misa que el Gobierno entiende como del ámbito familiar y en la que participarán Cantera y el sacerdote Tejero, hijo del militar golpista del 23-F.
Para los memorialistas, aunque este sea motivo de celebración, solo es el principio de la reparación de las víctimas. Para empezar, en el mausoleo del Valle de los Caídos todavía permanece el fundador de la Falange, José Antonio Primo de Rivera. Por otro lado, de momento seguirán permaneciendo en Cuelgamuros más de 33.000 cadáveres. Para los familiares que quieren recuperar los cuerpos de las víctimas de este monumento funerario del dictador, la fosa común más grande de España, la exhumación de Franco no es suficiente, y en algunos casos tampoco prioritaria. Su objetivo principal es poder exhumar a los suyos y poder enterrarlos en los cementerios de sus localidades, donde el régimen robó sus cadáveres sin el consentimiento de sus allegados.
