Almeida tergiversa un informe del Comisionado de la Memoria para retirar el memorial a los fusilados por el franquismo
Las asociaciones memorialistas se sienten «humilladas» y critican el intento de equiparar a quienes defendieron la democracia y a quienes apoyaron el golpe militar franquista
lcarrasco@infolibre.es @_CarrascoLara
Publicada el 27/11/2019
El Comisionado propuso crear dos memoriales: uno para los fusilados por la dictadura entre 1939 y 1944 y otro paras las vÃctimas de la guerra civil
Almeida pretende ahora juntar a todas, amparándose precisamente en ese informe del Comisionado
La polémica comenzó este lunes. El Ayuntamiento de Madrid, gobernado por PP y Ciudadanos, comenzó a retirar las placas con nombres de vÃctimas del franquismo del Memorial del cementerio de la Almudena. La construcción del homenaje se encontraba paralizado desde julio, pero ahora han decidido dar marcha atrás. El motivo por el que se frenó y el motivo por el que ahora, directamente, se ha decidido proceder a la retirada es el mismo: el memorial no cumple con el acuerdo del Comisionado de Memoria Histórica, un órgano creado durante el Gobierno municipal de Ahora Madrid y extinguido antes de la llegada de José Luis MartÃnez-Almeida al Palacio de Cibeles. Y en esa idea insistieron este martes el alcalde y la vicealcaldesa, Begoña VillacÃs, que aseguraron que el Ejecutivo está siendo «sumamente escrupuloso» con lo dictado por el organismo que, durante su existencia, presidió Paca Sauquillo. Pero ella, precisamente, no está de acuerdo. Según dice, la institución no avaló en ningún momento el proyecto que ahora pretende acometer el Ayuntamiento de Madrid.
¿Cuál es? Lo que pretende el equipo liderado por Almeida es construir un homenaje a «todas las vÃctimas» entre 1936 y 1944. El motivo: que «en ambos bandos hay heridas e igual de profundas», según dijo el propio Ayuntamiento a Europa Press. Por eso, la placa llevarÃa inscrito lo siguiente: «El pueblo de Madrid a todos los madrileños que del 36 al 44 sufrieron la violencia por razones polÃticas, ideológicas y religiosas. Paz, piedad y perdón». «Este gobierno no va a hacer polÃtica de memoria histórica, asà como no hace polÃtica con el Código Penal. Esta ley es una ley, hay que cumplirla y no hacer polÃtica con ella. Aquà radica la primera diferencia con lo que hizo Más Madrid y PSOE, una polÃtica revanchista y sectaria que solo sirvió para reabrir heridas y para generar problemas donde no los habÃa», dijo el presidente del Pleno, Borja Fanjul, durante su intervención de este martes en el Ayuntamiento.
¿Y qué hizo Más Madrid y PSOE? Su idea inicial de memorial era muy diferente. Lo que quiso construir el Gobierno municipal liderado por Manuela Carmena era un homenaje a los al menos 2.937 fusilados frente a las tapias del cementerio entre 1939 y 1944. AbarcarÃa, por tanto, a los asesinados por la dictadura franquista. Y esta es la idea que, según han resaltado desde el actual Ayuntamiento, va en contra de lo propuesto por el Comisionado de Memoria Histórica. «El monumento ha de ser de reconciliación», afirmó Fanjul usando, precisamente, las palabras empleadas por Vox, su socio de Gobierno, también en el Pleno de este martes. El portavoz del partido de extrema derecha en el Ayuntamiento, Javier Ortega Smith, abogó también por un memorial «de reconciliación» en lo que calificó de una «posición razonable». «Que haya un solo memorial que recuerde a todas las vÃctimas de esos terribles años de guerra fraticida», dijo.
Pero, ¿cuál es la propuesta que hizo el Comisionado de Sauquillo? Según explica ella misma, no abogaron por la construcción de un único homenaje en recuerdo a las vÃctimas desde 1936 y hasta 1944. Propusieron, dice, dos memoriales: uno con las vÃctimas fusiladas entre 1939 y 1944 en el que, eso sÃ, no figuraran sus nombres, y otro con las vÃctimas de la Guerra Civil entre 1936 y 1939. Y asà figura, de hecho, en el acta que el organismo elaboró en marzo de 2018 y a la que ha tenido acceso infoLibre. «Los miembros del Comisionado debaten distintas alternativas sobre el proyecto del Memorial del Cementerio del Este. Finalizada la exposición de las distintas alternativas, los miembros del Comisionado, por consenso, adoptan el siguiente acuerdo», dice el documento. «Mantener el proyecto de intervención memorialÃstica, ya acordado por el Comisionado, si bien, sin incluir los nombres de las personas fusiladas» y «erigir también, en este mismo cementerio, en un lugar cercano y relevante, un memorial similar en recuerdo de las miles de vÃctimas de ‘paseos’ y ‘tribunales populares’ durante la Guerra Civil de 1936-1939».
Por tanto, el Ejecutivo municipal sólo está siendo «sumamente escrupuloso» en el apartado de eliminar los nombres de los fusilados. Pero no en el de erigir dos memoriales y no uno sólo. Sobre este hecho, precisamente, se pronunció el propio Fanjul en el Pleno de este mismo martes. Según criticó, habrÃa costado «otros 520.000 euros», y «esto no es la AndalucÃa del PSOE donde habÃa dinero para todo», ironizó. infoLibre se puso en contacto con el Ayuntamiento para que respondiera a las palabras de Sauquillo, pero no obtuvo respuesta.
Un homenaje con un proyecto replanteado
En cualquier caso, la de erigir dos memoriales diferenciados no fue la primera opción del Comisionado de Memoria Histórica aprobado durante el Gobierno de Carmena con la abstención, precisamente, del PP. La idea pionera era la de construir un espacio de memoria con los nombres de las vÃctimas fusiladas. Pero el proyecto fue replanteado. Lo cuenta Txema Urkijo, el que fuera asesor del organismo. Según recuerda, el Comisionado elaboró un informe de lugares de memoria, es decir, de «espacios urbanos» situados en la ciudad de Madrid donde habrÃa que llevar a cabo una intervención para informar que se considera como tal y por qué se hace. Uno de ellos era el cementerio de la Almudena.
«En sus tapias fueron fusilados entre 1939 y 1944 alrededor de 3.000 personas», asegura Urkijo. Por ello, el Comisionado propuso construir allà algún tipo de recuerdo. Y en ese mismo informe el organismo asegura que «tiene conocimiento de una idea de intervención que manejan algunas asociaciones de afectados y familiares de vÃctimas vinculadas a este cementerio». «Y hace suyos los criterios básicos que sostienen dicha propuesta», continúa el documento, que recoge, expresamente, la iniciativa de construir una «lápida o muro memorial recordatorio de las vÃctimas en la parte próxima a los restos de la tapia original del cementerio».
QuerÃan hacerlo con los nombres de todos y, para ello, encargaron un informe detallado para conocerlos. Pero la presentación del documento generó polémica. Según avanzó ABC, entre el listado se encontraba el nombre de más de 300 «chequistas». «Eso generó una polémica que llegó al Comisionado», recuerda Urkijo, que sitúa ahà el origen de la decisión final de que se eliminaran los nombres del memorial de fusilados y de que, por otro lado, se construyera otro para todas las vÃctimas. Fue la manera de llegar a un consenso.
Pero si sólo se estaba construyendo el primero es porque, según explica, «el Gobierno municipal decidió hacer lo prioritario: reconocer a las vÃctimas olvidadas que no habÃan sido reconocidas». Rechaza, por tanto, las acusaciones de «sectarismo» que llegan desde los partidos de la derecha hacia las polÃticas memorialistas del Ejecutivo de Ahora Madrid. Y lo hace porque en el informe sobre lugares de memoria también hay cuatro espacios que tienen que ver con las vÃctimas del bando golpista.
Dice, por tanto, que los argumentos esgrimidos por el Ayuntamiento de Almeida no son correctos. «Usan la propuesta del Ayuntamiento para retirar los nombres, pero luego no hablan de hacer dos memoriales, sino meter en ese a todas las vÃctimas. Y eso fue rechazado por el Comisionado», insiste.
Una «humillación» que ya ha sido denunciada
No obstante, la decisión del Ayuntamiento de Almeida ya ha tenido repercusión entre las asociaciones y los colectivos memorialistas. Tanta, que este mismo martes algunas personas se concentraron ante el Palacio de Cibeles para mostrar su repulsa a la retirada de las placas de los fusilados. Pero no todo ha sido la acción en la calle. La Asociación Memorialista Ranz Orosas ha registrado este martes dos denuncias: una ante la FiscalÃa General del Estado y otra ante el Tribunal de Cuentas. Según consta en los documentos, la obra que ahora ha sido paralizada y que costó 210.000 euros al Ejecutivo ya estaba completada al 80%. Por tanto, la organización ha instado a los dos organismos a investigar al Ayuntamiento por un posible delito de prevaricación.
«Sabemos objetivamente que se han tirado a la basura 200.000 euros de los madrileños y la Ley de Memoria Histórica habla de reparación, de retirada de simbologÃa y de exhumación, no de tirar a la basura 200.000 euros», critica Eduardo Ranz, abogado responsable de las denuncias. «Eso es lo más importante», señala.
Los colectivos, en cambio, van un poco más allá y denuncian lo que consideran una «humillación» a las vÃctimas del franquismo. Y es que la retirada de las placas se produce tras años de lucha de muchas personas para poner esos nombres en el lugar en el que fueron asesinados sus familiares, según denuncia Emilio Silva, presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica. Admite que hubo vÃctimas de ambos bandos, pero que es inconcebible equiparar unas con otras. «En el otro bando también hubo vÃctimas, pero no es lo mismo. Nadie en Alemania reivindicarÃa un monumento para quien apoyó el nazismo», critica.
Además, recuerda, las vÃctimas que el Ayuntamiento quiere añadir «recibieron todo tipo de reparaciones del Estado franquista». «A las vÃctimas de los muertos de la Almudena ni siquiera les dan la oportunidad de que figure su nombre por ningún sitio. Han sido borrados por la historia franquista», añade. «Lo que hace el Ayuntamiento es compartir la metodologÃa de la dictadura: hacer que sus vÃctimas no hayan existido. Y eso es muy bestia», lamenta.
Arturo Peinado, presidente de la Federación Estatal de Foros por la Memoria, opina lo mismo. «Es cierto que ha habido vÃctimas en los dos bandos, pero unas han sido sobradamente reconocidas durante la dictadura y otras no han recibido justicia, ni se les han anulado las sentencias, ni han recibido la misma consideración por parte de la democracia. Y esas son a las que hay que resarcir ahora», afirma. «No se puede comparar a los defensores de la democracia y de las libertades con los que la agredieron. Hay vÃctimas y hay vÃctimas», añade.
Además, según denuncia Silva, la utilización del Comisionado para justificar esta iniciativa no tiene sentido. En primer lugar, porque es un «órgano consultivo» cuyas propuestas no son «de obligado cumplimiento». Por eso, critica que tras ese argumento tan sólo hay una intención de justificar su polÃtica contraria a la reparación de las vÃctimas. «Toman una decisión y luego tienen que justificarla. Si me sirve el Comisionado, me sirve el Comisionado», sentencia.
El alcalde de Rivas Vaciamadrid, Pedro del Cura Sánchez, presentó este martes una propuesta al Ayuntamiento de Madrid para «otorgar un destino digno» a las placas con nombres de vÃctimas del franquismo del Memorial ya retiradas. «En nombre de nuestro compromiso con la memoria democrática, Rivas se ofrece a atesorar en nuestro municipio esa nómina de dignidad y otorgarle el espacio que se reserva a los monumentos importantes», dijo.