El Gobierno, sobre su hachazo a la memoria histórica: «Damos pleno cumplimento a la ley»
«Hay una actividad constante, permanente», señala Catalá ante las crÃticas del PSOE y el PNV
JUAN RUIZ SIERRA
@juanruizsierra
MIÉRCOLES, 21 DE DICIEMBRE DEL 2016
El Gobierno se ha jactado este miércoles de dar «pleno cumplimiento» a la ley de memoria histórica, pese a que desde el 2012 no ha dotado económicamente a esta norma, aprobada en el 2007 por el PSOE. Frente a esta realidad, criticada por una oposición que quiere aprovechar el actual equilibrio de fuerzas en el Congreso para forzar al Ejecutivo a exhumar a las vÃctimas del dictador Francisco Franco, el titular de Justicia, Rafael Catalá, ha defendido todas las actuaciones en este campo.
Según el ministro, la actividad es «constante, permanente», ya que se mantiene «el mapa de fosas, que ha tenido 90.000 visitas en lo que va de año». Catalá, durante la sesión de control en el Congreso de los Diputados, no ha hecho ninguna referencia a los fondos destinados a la ley.
«NI UN SOLO EURO»
Tanto Aitor Esteban, del PNV, como Isabel RodrÃguez, del PSOE, han cargado contra la falta de compromiso de los conservadores en este campo. La diputada socialista ha señalado que la Fundación Francisco Franco «está mandando cartas a los alcaldes del PP para que incumplan esta ley» y ha recordado que el PP ha dejado «el presupuesto» de la ley de memoria histórica «a cero», debido a motivos que no tienen que ver con la «economÃa», sino con la «ideologÃa».
Como prueba, RodrÃguez ha recuperado estas declaraciones del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el 2008: «EliminarÃa todos aquellos artÃculos que hablan de dar dinero público para recuperar el pasado. Yo no darÃa ni un solo euro del erario público a esos efectos».
SERIE SOBRE SERRANO SUÑER
Esteban también ha reprochado al ministro que el Ejecutivo no tome alguna medida ante la serie que emite Tele 5 ‘Lo que escondÃan sus ojos’, que presenta al ministro y cuñado de Franco, Ramón Serrano Suñer, como un «simpático e inofensivo señor». Catalá ha replicado que en España no hay «censura» y que la producción se emite en un canal privado. A juicio de Esteban, esta miniserie es un ejemplo más de la larga lista de incumplimientos de la ley de memoria histórica.