Se puede intentar recuperar la memoria y al mismo tiempo destruirla
A raíz de la pretensión de exhumar fosas situadas dentro de los cementerios en general, y en el caso de Talavera en particular
Foto: Homenaje en la Patio 42 del Cementerio de Toledo. @apces
SE PUEDE INTENTAR RECUPERAR LA MEMORIA Y AL MISMO TIEMPO DESTRUIRLA
Parece un contrasentido pero no lo es y voy a intentar explicarlo. La cuestión viene a raíz de la pretensión de exhumar fosas que están situadas dentro de los cementerios, en general, y en el caso de Talavera de la R., en particular.
Creo que el caso paradigmático sería el llamado “Patio 42” en el cementerio de la capital regional, Toledo. Vamos a intentar refrescar la MEMORIA (de ello estamos hablando, ¿no?)
En un tiempo no muy lejano el Alcalde de la Ciudad, Sr. Molina, del Partido Popular, vio la posibilidad de meter las excavadoras en ese lugar para edificar nichos, bueno quizás además de esa posibilidad existía la de destruir un lugar que le escocía por el significado que tenía y tiene por “albergar” a cientos de asesinados durante la entrada de las tropas franquistas en la Ciudad de la que él era el máximo responsable y, tal vez, en su mente le podía más las esencias ideológicas que le envolvían. En aquel momento hubo una fuerte contestación política y del movimiento memorialista que paralizó sus perversos intentos y que, a pesar del daño causado al remover los restos de tantas personas allí enterradas, se pudo retomar la idea que, tiempo después convirtió el sitio en un LUGAR DE MEMORIA donde hoy se puede rendir homenaje a aquellos que allí fueron enterrados. Se realizó un magno acto y se paró la idea de que la MEMORIA se podía borrar.
Hay que resaltar que el lugar, también patio de caridad, estaba bien documentado ya que existe un libro del Ayuntamiento done estaban detallados todos los entierros y el lugar de ellos, labor de la que debemos honrar al fallecido Compañero José María Ruiz Alonso y a Natividad Rodrigo. Allí se puso una piedra de cordura en la necesidad de preservar los LUGARES DE MEMORIA.
Bien ahora veamos qué puede pasar en el afán, sin duda honesto, de que alguien quisiera recuperar los restos de un ser querido de una fosa de estas características, lugares de cientos de inhumados, de personas que fueron allí enterradas, asesinados por el franquismo, que pertenecían a niños no bautizados, a transeúntes, a personas pobres o indigentes, etc.….. y que además no estén estudiadas los individuos allí enterrados, ni se sepa el verdadero contorno de la fosa común ya que el perímetro actual se hizo sin saber la verdadera dimensión de ella.
En el cementerio de Talavera se enterraron asesinados desde 1936 a 1943, aproximadamente, después hubo obras de adecuación cuando no de ampliación del cementerio. Lo que hoy conocemos como fosa, delimitada por unos aros de hierro, ajardinada, con un humilde memorial y con varias placas situadas en la pared del fondo (según los testimonios, ese lugar no fue el de las ejecuciones fascistas y se les llevaba a ese lugar para enterrarlas) no es seguro que abarque los límites verdaderos de la fosa. Entonces ¿qué hacer?
Desde la óptica de una lógica aplastante deberíamos dedicar todos los esfuerzos a, como hace tiempo se propuso a los responsables municipales, dedicar unas becas de estudio para sacar a la luz todo el arsenal de archivos que pueda haber sobre la represión franquista. La fosa es, en la actualidad un LUGAR DE MEMORIA, donde se puede dar homenaje a todas aquellas personas asesinadas por la represión franquista. Si en algún momento se decidiera actuar sobre ella ¿qué pasaría?
Podrían suceder varias cosas: una, que se exhumaran los cuerpos, cuestión harto complicada por la cantidad de los que en principio se presume que allí hay (más de 400 según estudiosos del tema) ¿Porqué sacar a unas y a otras no? se preguntan algunos, ¿qué hacer con los restos de los que no fueran reconocidos por la pruebas de ADN, dicen otros, y de los nonatos, y de los que después de tantas pruebas nada se sabrían de ellas (recordad que una gran parte murió muy joven y sin descendencia)? ¿Cómo saber a quiénes pertenecen? Esos restos irían al osario, a una zona donde se guardarían, y por fin otra cuestión: ¿quién sufraga todo este tema económico para a la postre, quién sabe si le estamos haciendo el juego a quien quiere desterrar la MEMORIA y dejar el camino expedito para que en el lugar se construyan los nichos que ya, no olvidemos, dejó entrever el gobierno municipal.
Sinceramente, hay varias personas que rinden homenaje en ese lugar con placas donde hacen mención a sus seres queridos. Si hay que hacer otro mejor memorial en el lugar lo pensamos y proponemos, pero no destruyamos un lugar que es referente de la MEMORIA DEMOCRÁTICA en nuestra localidad.
Por cierto, y al hilo de todo esto, ¿por qué no se plantea la eliminación del monumento que a escasos metros de la fosa homenajea a los vencedores, con una inmensa cruz de piedra?
Emilio Sales Almazán. Presidente del Foro por la Memoria de Toledo