Una Guerra Civil sin mitos. MORADIELLOS PUBLICA UN ESTUDIO PONDERADO DE LA CONTIENDA
El Mundo Libro - 09/09/2004

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MADRID.- El mito heroico de la guerra pervive en ambos bandos, derechas e izquierdas, ha manifestado el historiador Enrique Moradiellos en la presentación de '1936. Los mitos de la Guerra Civil'. El libro, publicado por Península en la colección Atalaya, es una historiografía de Moradiellos, profesor de la Universidad de Extremadura, ponderada y actualizada, sobre la cruenta Guerra Civil, que desenmascara los mitos.

Jorge Martínez Reverte comentó en la presentación del libro que se trata de un análisis pertinente de la Guerra Civil porque hace hincapié en un estudio profundo de las causas que la provocaron, así como de lo aportado por la historiografía española.


Reverte indicó que '1936...' es un libro "pertinente, exacto, documentado y profundo", que pretende contrarrestar las visiones más mitificadoras de la contienda fratricida que vienen sosteniendo ciertos historiadores, entre los que citó a Pío Moa, autor de varios estudios que configuran una clara división entre "buenos" y "malos" y que han gozado de una notable aceptación popular.


En este sentido, el novelista recalcó que en 1936 lo que aconteció fue un enorme "fracaso de la política" y una nefasta polarización social que llevó a la "obligatoriedad de adscribirse a uno de los dos bandos en liza". También señaló que la obra pone en evidencia los mitos periféricos, que encuentran más resonancia de la que debieran, y que sostienen que la guerra fue una lucha de España contra Cataluña y el País Vasco.


Ni heroica ni locura


El mito heroico, explicó Moradiellos, se centró en la derecha, a través de las interpretaciones de la derecha, para la que fue una "cruzada" en la que se combatió por España y por la Fe Católica, mientras que para la izquierda fue una "gesta heroica" en la que se defendieron valores fundamentales de la persona.


Los resultados de la guerra demuestran, en opinión de Moradiellos, que no fue una gesta heroica ni una locura, pero adentrarse en la verdad compleja "no compite con los mitos", y sólo a partir del libro de Hugh Thomas en los años sesenta se empezaron a conocer las "zonas grises" de esta guerra, es decir, la génesis, el estallido, el curso y el desenlace del conflicto.


El papel de los historiadores ha sido desde hace tiempo señalar que "todos hicieron cosas" aunque se firmara un "pacto de silencio", señaló Moradiellos.


Las dos Españas, un error


Para este historiador el mayor logro de la investigación historiográfica reciente consiste en haber demostrado lo inadecuado del esquema de las dos Españas, porque detrás de ellas no existían dos proyectos políticos con sus respectivos apoyos sociales, sino "tres" núcleos de proyectos políticos muy distintos y antagónicos: el reformista democrático, el reaccionario autoritario o totalitario y el revolucionario colectivizador.


Esta tríada de modelos, surgida en Europa al compás del impacto de la Guerra Civil de 1914-1918, competía para lograr la estabilización política e institucional de los países continentales a tono con sus respectivos apoyos sociales e intereses económicos y quedaron definidos por las 'tres erres' políticas que iban a dominar el periodo de entreguerras (1919-1939): reforma, reacción y revolución.


El golpe militar que se produce en España el año 1936 fracasa en las zonas más modernizadas, incluía la propia capital del Estado, y se convirtió en una guerra internacionalizada cuando ambos bandos tuvieron que pedir ayuda a otros países.


Los dos bandos


Moradiellos recalcó que el bando franquista logró configurar un ejército combatiente bien abastecido, construir un Estado eficaz para regir la economía de guerra y sostener una retaguardia civil comprometida con su causa, así como la ayuda de Italia y Alemania.


El bando republicano, por su parte, no habría sufrido un desplome interno y una derrota militar si no hubiera tenido que afrontar las consecuencias del embargo de armas impuesto por la política europea de no intervención y la inhibición de las potencias democráticas occidentales.