Zaragoza aún cuenta con un centenar de referencias franquistas
20 minutos - 18/11/2005
http://www.20minutos.es/noticia/66520/0/zaragoza/centenar/franquistas/
Eva Laguna. 18.11.2005
La polémica estatua de Franco sigue en la Academia Militar, y en calles y urbanizaciones persisten rémoras del anterior régimen.
El domingo se cumplen 30 años de la muerte de Franco, pero su huella sigue presente en gran parte de las calles y monumentos de la ciudad.
Desde la estatua del dictador que preside la entrada de la Academia General Militar (AGM) hasta el aeropuerto de Zaragoza, cuyo nombre oficial es el de General Sanjurjo, la ciudad está salpicada de nombres y símbolos relacionados con el franquismo. El caso de la estatua llegó al Congreso de los Diputados de mano de IU, y el Gobierno central se comprometió a retirarla en septiembre, pero a día de hoy sigue allí. De hecho, IU volvió a pedir su retirada hace 15 días. Las calles dedicadas a mandos militares (General Sueiro, Comandante Santa Pau, Capitán Portolés), a fechas señaladas para el franquismo (Diez de Agosto, Tres de Agosto, Cinco de Noviembre) o a batallas de la Guerra Civil (Posición San Simón, Batalla del Ebro, Mártires de Simancas) proliferan por toda la ciudad. Todavía existen también los grupos de viviendas sindicales que se construyeron durante la dictadura y que llevan nombres de mandos militares, como Alférez Rojas, General Franco o Teniente Polanco. Incluso el aeropuerto de Zaragoza lleva Sanjurjo como nombre oficial y la placa de entrada al parque Pignatelli por el paseo Cuéllar está presidida por un águila franquista. En el ámbito de las leyes todavía contamos con normas de la época franquista, como la Ley de Expropiación Forzosa (1954), Ley de Minas (1953), Ley de Colegios Profesionales (1974) y Reglamento de Servicios de las Corporaciones Locales (1955). Conflictos en los pueblos Muchas localidades aragonesas mantienen referencias a Franco en sus calles y, en algunas, los concejales de CHA han solicitado el cambio de nombre, originando conflictos entre grupos políticos. El caso más flagrante es el de Ricla, donde el equipo de gobierno recuperó la placa con el nombre General Franco para una plaza que llevaba cinco años sin ella y estaba a la espera de recibir el nombre de plaza del Olmo, propuesto por CHA.
|