La recuperación de la memoria histórica en la Costa da Morte
La Voz de Galicia 11/01/2006

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ARCHIVO LUIS LAMELA

Reedición de un clásico sobre la represión en el trienio 1936-1939

Luis Lamela reedita, y amplía, un trabajo muy documentado sobre la persecución y muerte de republicanos de la zona durante la guerra civil

(Lugar: s. g. | carballo)

Edicións do Castro acaba de reeditar, revisada y ampliada, la obra Crónica de una Represión en la Costa da Morte , del corcubionés afincado en A Coruña Luis Lamela García.

Las primeras líneas de la introducción de este volumen, que vio la luz en julio de 1995, definen el trabajo: «La historia que vamos a encontrar en las páginas de este libro comienza en el momento en que en España todos se creyeron con el derecho a matar a sus semejantes. De esa época triste y fratricida, se vino practicando el más espectacular de los silencios sobre lo ocurrido en nuestra tierra. Ocurrió lo contrario de lo sucedido en las naciones serias y las culturas trascendentes, las que asientan su entendimiento presente sobre la fijación y valoración de la memoria histórica».

La Xunta de Galicia ha proclamado que el 2006 sea el Ano da Memoria, buen momento, por tanto, para recuperar algunas de las primeras investigaciones sobre tan espinosa cuestión. Primeras, no ya de la zona o de Galicia, sino incluso de España. De hecho, el primer consejo de guerra de la época publicado en España fue el de Pepe Miñones, también de la mano de Lamela, en 1991.

En Crónica de una represión en la Costa da Morte, el autor habla de represaliados y fusilados. De los 111 vecinos exiliados, con breves fichas sobre cada uno. De los más de cien muertos. De los innumerables sancionados, encarcelados, fugados al monte Pindo cuando todo comenzaba.

A los recovecos graníticos del Pindo se escaparon, en efecto, decenas de vecinos de la zona, llegados desde Betanzos o Carballo, pero sobre todo del entorno de Cee y Corcubión. Un episodio que, de no ser por lo trágico y terrible de su trasfondo, resulta hasta apasionante. Tanto, que la próxima novela de Lamela, tras esta reedición, estará dedicada a quienes se escondieron semanas y hasta meses en las cuevas de la montaña mítica, o mágica.

Fusilados en la portada

También habla Lamela sobre los muertos, los fusilados. Con preeminente jerarquía, en la portada: aparece un acta del Gobierno Militar de La Coruña de 1936 en la que se condena a muerte a los trabajadores o sindicalistas de Carburos de Cee: Norberto Recamán, José Lago, Teófilo Mejuto, Perfecto Trasmonte, Jesús Chouza, Florentino Canosa, Manuel García y Domingo López. Cayeron en el Campo da Rata coruñés el 9 de diciembre.

El autor, en los añadidos al original, incorpora datos sobre la represión en Cee y Corcubión; aclaraciones sobre lo ocurrido en 1936 en Vimianzo, A Ponte do Porto y Camariñas, Fisterra y Zas, e investigaciones sobre Muxía y Malpica, incluidas las huidas por mar de los pesqueros Montevideo , San Adrián y Rocío .

También aparece la relación oficial de fallecidos no incluidos en la primera edición, y el ya citado trabajo sobre el exilio.

El libro contiene fotografías, copias de actas y documentos oficiales, reproducción de conversaciones. Personajes clave para la zona, como Pepe Miñones, también dan contenido a las 350 páginas del volumen.

Un vasto material sobre unas cuestiones que, asegura Lamela, tienen un «interés enorme», sobre todo para los nietos de los represaliados, que son quienes más se dirigen a él para invitarle a actos o para recabar o aportar información.

Lamela, de 60 años, es subdirector de Servicios Operativos de Caixa Galicia. Desde hace quince años, uno de los principales investigadores sobre la guerra civil en Galicia. Empezó con Pepe Miñones, siguió con Foucellas, los Inmolados gallegos , Estampas de injusticia y los efectos de la contienda en A Coruña o Santiago. Es conferenciante habitual sobre estos temas.