Nuestros veteranos

SATURNINO CALVO, MEMORIAS DE UN LUCHADOR

Charla mantenida Saturnino Calvo (Nino), uno de los veteranos del PCE-EPK

" Hay hombre que luchan un día y son buenos,
hay hombres que luchan unos años y son muy buenos,
pero hay quienes luchan toda la vida,
esos son los imprescindibles.
"
Bertold Brecht

Recuerdo perfectamente cuando vino la república, tendría yo unos 10 años, estaba en el frontón jugando con los de mi edad cuando por la carretera de Santander pasó un coche con la bandera republicana desde el que iban gritando: "!Se ha declarado la República en Eibar¡" la gente se salió a la calle gritando" ¡viva la República!" y yo, como un chaval, pues claro ¡viva la República! así empezó la cosa. Al cabo de unos años un hermano mío me llevó al local del Partido Comunista, que con la República había sido legalizado, porque durante la dictadura de Primo de Rivera había estado en la clandestinidad, ahí es cuando me afilié a los pioneros rojos y estuve así aprendiendo los himnos revolucionarios de la época.

Al de unos pocos años, en 1934 se declaró la Revolución de Octubre, recuerdo que estaba yo en la cama cuando llamaron a la puerta, era un joven socialista que dijo a mis hermanos : "¡Venga, hay que salir a la calle que ha estallado la revolución en Asturias¡" ahí es cuando yo ví por primera vez una pistola, la tenía mi hermano en la mesilla, se la metió en el cinto y salieron los dos. Quiero aclarar una cosa que mucha gente de aquí no sabe, y es que la cuenca minera de aquí fue tomada, se volaron los puentes entre El Valle y Ortuella y quedamos incomunicados con el resto de la provincia, vinieron unos aviones creo que de Lamiako y tiraron unas bombas en la sierra de Galdames hiriendo a un hombre que estaba trabajando en la huerta, no sé si le hirieron o lo mataron. Cuando terminó la huelga general, que en Vizcaya duró 8 días, a mi hermano y a varios más los detuvieron pero el más joven se escapó porque tenía más responsabilidades que el mayor ya que durante la huelga había desarmado a los guardias de las minas y claro, en vez de quedarse se largó. Se fue andando desde Balmaseda hasta la provincia de Palencia porque la represión era terrible y allí estuvo escondido en casa de unos familiares, luego marchó de allí a Madrid donde se encontró con otro compañero que más tarde sería comandante del batallón Perezagua, nada más y nada menos que Manu Eguidazu Garai, este hombre era ingeniero de caminos y fue el que durante la guerra advirtió a Aguirre que cómo había encargado las obras del cinturón de hierro de Bilbao a Goikoetxea cuando él sabía de buena tinta que era falangista y Aguirre le contestó : ¡bueno, es que para vosotros el que no es comunista ya es fascista! claro , luego pasó lo que pasó, el fulano ése se pasó con los planos a los fascistas.

En 1936 ganó las elecciones el Frente Popular, llegó la amnistía y salieron a la calle todos los presos, también mi hermano. Recuerdo que entonces sacamos las banderas del partido que teníamos escondidas por la represión, yo estuve continuamente en la cárcel de Larrínaga a ver a mi hermano mientras estuvo preso y allí ayudábamos a los presos en todo lo que podíamos.

Luego vino el 18 de Julio, lo cierto es que aquello no nos cogía de sorpresa , Mundo Obrero lo venía denunciando constantemente, Los comunistas fuimos los primeros que lo veíamos, concretamente en Navarra el camarada Jesús Monzón informó al Partido cómo los requetés ya estaban haciendo prácticas de tiro, instrucción y maniobras de despliegue en guerrilla. Recuerdo que en Ortuella nos enteramos por una radio que estaba puesto en el balcón del local del Partido, que se había sublevado Franco al frente del ejército de Africa y luego escuchamos la voz de Dolores con el grito" ¡No pasarán!" y" ¡ más vale ser la viuda de un héroe que la esposa de un cobarde!" En fín, todas las consignas que lanzaba la camarada Pasionaria que fue la paladina de la defensa de Madrid.

Entonces fue cuando empezamos a organizarnos para hacer frente al fascismo, empezamos a concentrarnos en Bilbao, la mayor fuerza la tenían los mineros. Larrañaga había solicitado dinamiteros para tomar los cuarteles de Loyola, que se habían sublevado y el Hotel Maria Cristina, donde se habían parapetado los fascistas. Todo el mundo salió para el frente, uno de mis hermanos entró en fuego en Mondragón y el otro iba con el batallón Perezagua en dinamiteros. Yo entonces ya tenía 16 años y bajé a Bilbao. En las escuelas de Indautxu se estaban entrenando los batallones de la JSU, yo me uní a ellos, pero cuando íbamos a partir al frente me dijo el teniente de la compañía que saliera de la formación y me volviera a casa , que no tenía aún 18 años y además ya tenía dos hermanos en el frente, yo me revolví un poco pero no sirvió de nada. Luego, con los años, me diría mi hermano que había sido por él , que al enterarse de que estaba yo en Indautxu le había dicho al teniente que me mandara a casa, que con dos hermanos de la misma familia en el frente ya era bastante.

Entonces me puse a trabajar en la mina ocupando el puesto de mis hermanos, pasados unos meses volví a la carga, iba con otro chaval y vemos un letrero: "ELA-STV, milicias de ELA" , entramos para alistarnos en las unidades de zapadores, para hacer trincheras y todo eso. Allí nos preguntaron qué edad teníamos y les dijimos que 18 años, se rieron , pero uno de los que estaba allí nos preguntó de pronto que de dónde éramos, yo respondí que de la cuenca minera de Ortuella y me dijeron que yo sí iba a ir porque seguramente sabía tirar bien de pico y pala , al otro que venía conmigo no le cogieron porque era aún más joven que yo.

Así es como conseguí ir al frente, lo hice en el batallón San Andrés, enpezé cavando trincheras entre Villa Real y Villabona, aquello era jodido, tenían que hacer guardia por la noche los milicianos delante de nosotros mientras trabajábamos porque sino, podían dar un golpe de mano y pillarnos allí . Estuve así unos meses, hasta que estando en Balmaseda para marchar al frente Santander-Burgos nos avisaron que había empezado la ofensiva en Otxandiano, que habían tomado Otxandiano y Gorbea, subimos a los camiones y al llegar al lado de Zianuri aquello estaba lleno de camiones, artillería... todo colapsado, así que nos quedamos allí. Por la noche nos llamaron a hacer trincheras y echar alambradas en el alto de Barazar , allí estaba el batallón Perezagua, el Tomás Meabe, el Isaac Puente y otros. Había empezado una ofensiva sobre la zona, al principio se resistió bien porque era un buen monte pero luego vino otra ofensiva con gran cantidad de tropas, se rompieron las líneas y empezaba la desbandada, recuerdo que entonces un chico joven que era teniente del batallón Tomás Meabe lanzó una arenga a todos sus milicianos: "¡ si no podemos contenerles hay que organizar aquí la guerra de guerrillas, como Pancho Villa!". En esto, estando durmiendo por la noche en las cunetas de la carretera oímos un ruido acompasado: Run... run...run ¡Alto, quien vive! ¡ El batallón asturiano Víctor! (los asturianos tenían la costumbre de poner a sus batallones el nombre de su comandante) también venía el batallón Críspulo, cuyo comandante era un veterano luchador de la zona de Langreo, como estaban rotas las líneas no se sabía bien dónde estaba el enemigo, dos o tres de la zona estaban guiando a los asturianos hacia donde se encontraba , los asturianos nos dijeron que siguiéramos durmiendo que cuando dieran con los fascistas arrojarían bombas de mano para avisar. Al cabo de unas horas nos despertaron las explosiones a lo lejos, ya habían hecho contacto con el enemigo.

Allí estuvimos hasta que rompieron ese frente y ya se pararon, unos días más tarde siguieron y rompieron otra vez el frente entre Villa Real y Arabayona, hacia Mondragón, no podían ellos meterse mucho porque también podían quedarse cortados , entonces avanzaron hacia Durango y les aguantamos en un monte que hay por allí. Hubo unos combates muy duros, sobre todo bombardeos de su aviación, porque allí los alemanes probaron todo el material que utilizarían luego en la invasión de Polonia, fueron unos bombardeos terribles porque coincidió en una primavera en que no llovía y durante nos bombardeaban todo el día. Más tarde tomaron Durango. En esto nos mandaron ir a fortificar Amorebieta y allí estaba la VI Brigada que ya se había formado con los batallones Rosa Luxemburgo, el Amuategui y el Dragones (porque era de Mondragón) los dos últimos de la JSU. Los italianos habían tomado la Peña Lemona y los dos batallones de la JSU la volvieron a tomar hasta que por fín los nuestros tuvieron que recular de nuevo. Entonces, fue cuando nos avisaron que los que ya teníamos 18 años teníamos que incorporarnos a los batallones para cubrir las bajas, se disolvio la compañía de zapadores y a mí me mandaron al Amuategui, que se encontraba descansando en Bilbao, en ese batallón era entonces capitán Otxabiña, el que suele levantar la bandera republicana todos los 14 de Abril en Eibar.

Estando nosotros en Bilbao, nos llegó un señor avisando que estaban soltando a los presos fascistas que estaban en Larrínaga y que se estaban marchando a Artxanda, donde estaban los suyos. Nos dijo que por orden del Gobierno de Euskadi estaban abriendo las puertas de la prisión a los fascistas, fuimos para allá unos 60 con el fusil preparado y las bombas de mano. Al llegar nos gritaron "¡Alto, quien va!", saltó nuestro capitán :"¡El Amuategui! ¿y vosotros?" "¡Itxasalde!" respondieron ( un batallón nacionalista) y nosotros así, con las armas preparadas, recuerdo que uno que estaba a mi lado ya estaba quitando la anilla a una bomba de mano. De repente vino un coche y salió alguien gritando "¡Alto, alto!" era un teniente-coronel o algo así explicando que era una orden del Gobierno Vasco que había ordenado dejar libres a los presos fascistas, lo había ordenado Telesforo Monzón, que entonces era ministro de la gobernación y ya después de la dictadura estuvo en HB, después de esto nos tuvimos que marchar.

Cuando caía ya Bilbao, nos llegó la orden de que teníamos que retroceder, había que salir de Bilbao, nos dividíamos en pequeños grupos por las aceras porque la quinta columna ya actuaba y había paqueo desde los tejados ( francotiradores), de hecho, mataron a un capitán. Nos fuimos al Hotel Carlton, entonces sede del Gobierno Vasco, allí les explicamos que intentaríamos salir del cerco de Bilbao por que la ciudad ya estaba perdida, nos dijeron entonces que no, que había que quedarse. Nuestros mandos empezaron a discutir con ellos en euskara (eran vascos cerrados) la cosa se puso seria y casi llegan a las manos . "¡ haced lo que queráis !" dijeron los nuestros," nosotros salimos de aquí para seguir la lucha". La salida ya fue otra cosa , tuvimos que salir por Sabino Arana uno a uno y corriendo en zig zag para esquivar las balas del enemigo que disparaba sin cesar ( entonces aquella calle no estaba como ahora, entre casa y casa había mucho terreno descubierto).
Tengo que hacer alguna mención de Jesús Larrañaga, le conocí en Gallarta, en un mitin que dio siendo yo un chaval, era muy alto y delgado, de facciones típicamente vascas, euskaldún , fue el alma del ejército de Euskadi , nada menos que comisario de guerra, hasta que los del PNV lo destituyeron.

Siguiendo con mi vida, decir que luego, al llegar a Ortuella , cuando entro yo con el casco y el fusil, encontré a mi hermano que me dijo: "¡Venga , se ha acabado, deja el fusil y vete con los padres a Santander, a sacar a la familia!" , tenía cuatro hermanos pequeños de 2, 5, 7 y 9 años respectivamente, no me atreví a responderle y me los llevé. En esto que en Mioño, encontré a un amigo que había salido sin su madre, le advertí que si se quedaba en el pueblo podían matarla, pues a su padre ya lo habían fusilado, le dije que había que salvarla, así que volvimos a Gallarta. Por esa zona estaban ya combatiendo, allí había un batallón del PNV y otro asturiano, cuando íbamos a entrar a Gallarta nos detuvieron lo asturianos, que no nos querían dejar pasar hasta que llegó un teniente y nos permitió hacerlo, pasamos y avanzando nos encontramos con el batallón Perezagua, que estaba desplegado, allí eran todos conocidos, les explicamos nuestras intenciones y nos advirtieron del mucho peligro que corríamos, pues era ya de noche y sospechaban que el enemigo había ocupado ya el pueblo, pero al vernos jóvenes y ágiles nos dejaron ir , eso sí , nos dijeron que al volver debíamos gritar a los centinelas la consigna "república". Al llegar al pueblo había un silencio impresionante, llegamos a la casa de mi amigo y sacamos a su madre y a otras 20 mujeres que se vinieron también con nosotros, al llegar de nuevo a las posiciones del Perezagua :"¡Quien va!" "¡ La República!" y nos dejaron pasar.

Llegamos más tarde a Somorrostro, allí estaban cargando unos vagones de tren con todo tipo de provisiones, nos dijeron que iban a Asturias y nos llevaron hasta Santander. Santander estaba lleno de gente de por aquí así que enseguida nos reconocíamos, allí me encontré con el comisario del Perezagua en el parque de la calle Pereda, que entonces se llamaba "calle Rusia " ( entonces no se andaban con hostias) él ya me conocía por mi hermano y me dijo: " Oye Calvo, vas a salir para Francia ", me llevaron a una oficina para hacerme el salvoconducto cuando en la fila me encontró mi padre que me llamó, le expliqué que me iba a embarcar para Francia me dijo que antes visitara a mi madre para despedirme , que estaba en un pueblo cercano y estaba enferma.

En Francia estuve un tiempo hasta que un buen día nos dijeron que teníamos que volver a España , bien para la zona dominada aún por la República o a Vizcaya , tomada ya por Franco. Nos pusieron en fila e íbamos diciendo al funcionario donde volvíamos , yo elegí volver con la República. Nos montaron en un tren que a quienes elegimos la República nos llevó a Cataluña, recuerdo que al llegar a la frontera y divisarse la seniera, a la gente del tren le entró el pánico porque creía que nos devolvían a los franquistas (por los colores rojo y amarillo) yo, que había visto ya aquella bandera en un mitin de Azaña en Asesarre, empezé a tranquilizarlos diciendo que no se asustaran, que era la bandera catalana.

Al pasar la frontera empezé a mirar si había alguien conocido, lo que más abundaba eran asturianos, entonces ví unos autobuses que iban a salir , subí a uno que iba a Seo de Urgel y al llegar nos alojaron en un antiguo seminario. Allí me encontré a Julián, el marido de Pasionaria , que era comisario de las minas del Pirineo, nos conocíamos ya y estuvimos en el seminario con él como dos o tres meses.

La cosa se ponía ya difícil , se acercaba la famosa Batalla del Ebro, que comenzó el 24 de Julio de 1938. Yo quería alistarme en la JSU para ir al frente pero Julián me decía que no, que tenía que ir a Rusia para estudiar y volver con un "chato" ( un avión de guerra soviético) pero yo no quería, así que un día me marché a Barcelona para alistarme. Al llegar allí me encontré con el amigo al que había acompañado para sacar a su madre de Gallarta, que venía a lo mismo que yo, fuimos a la sede del PSUC en el Hotel de Cataluña, donde estaban los de la JSU y nos alistamos.

Al poco empezó la gran ofensiva contra Cataluña ¡Ay madre, la que se avecinó!. El Ejército del Ebro estuvo aguantando todo lo que venía, resistimos en la parte de Gerona, allí murieron muchos, nos dieron muy fuerte, yo tuve suerte, la vida es así. En la retirada llegamos hasta la frontera con Francia, recuerdo que allí había un cartel que ponía: "El camino hacia la frontera es el camino hacia la esclavitud", eran palabras de Negrín ¡ qué verdad fue! Los campos de concentración, los alistamientos obligados en la legión para evitar que te fusilaran...en fín. En esto vinieron los de las Brigadas Internacionales, ellos ya se estaban marchando de España, pero se quedaron más para ayudar , porque venía la ofensiva fascista ¡qué tíos!.

Pidieron voluntarios en nuestro batallón para intentar sacar a un grupo que estaba copado para que pudiera pasar el río, me ofrecí voluntario y recuerdo que me echó una bronca el teniente: "¡Es que siempre tienes que ser tú el que te apuntas a todo!" (Es que él era de Zorroza y solía preocuparse mucho de los de su tierra) porque yo, siempre que pedían voluntarios para, algo solía salir. Fuimos para donde estaba aquel grupo, de repente en una carretera "¡Alto quien va!" respondí "¡Somos de la República, de la 100 brigada!" ¡anda que no era famosa la 100 brigada de Líster, batallón divisionario de armas automáticas! era un batallón especial, que había estado en Brunete y todo eso. Les explicamos nuestro cometido y vinieron con nosotros, el trayecto les parecía largo y me preguntaban continuamente si ya sabía por donde iba, les dije que había que atravesar una presa que ya antes habíamos pasado, el agua nos llegaba por las rodillas, la tropa pasó con botas y todo, pero yo me quité las mías porque prefería enfriarme los pies entonces que pasarme toda la noche con el calzado mojado. Con todo, conseguimos pasar el río y nos reunimos con nuestro batallón, que nos esperaba al otro lado. Al día siguiente resultó que me encontré al famoso Valentín González, el "campesino", estaba con unos cuantos y, pasando yo me dijo : "¡Oye!, ¿dónde vás tú?" dije: " he venido a recoger paja para meterla en un saco para dormir" me dijo"¡Vale!" es así.

También recuerdo que cuando ya estábamos en pleno fuego , se acercó a nosotros un camión a todo gas y de él salió Enrique Líster gritando: "¡ venga, que están entrando los fascistas por esta parte!" viéndonos tan jóvenes nos preguntó que de donde éramos, le dijimos que de Bilbao y dijo "¡hombre, vascos, venga subid que nos vamos!" Mientras nos retirábamos el enemigo metía fuego sin parar, cayeron muchos.

Más tarde caí prisionero, cuando ví la cantidad de tropas y material de guerra que tenía el enemigo me quedé asombrado de cómo habíamos podido resistirles el tiempo que resistimos, por entonces el Ejercito Republicano ya tenía un buen nivel de organización pero faltaban medios, de hecho muchos combates se perdieron no por fallos tácticos nuestros ni por falta de coraje, sino por falta de armas y de municiones, sin más. No teníamos repuestos, por ejemplo, los aviones que vinieron de la URSS cayeron la mitad en la defensa de Madrid, por un tiempo se hicieron los amos del aire, pero cuando uno era derribado ahí quedaba, no había recambio y así con todo. Respecto a la organización hay que decir que quienes teníamos mejor nivel éramos los comunistas, el PCE fue el primero en juntar batallones para formar las primeras brigadas, la consigna era clara, disciplina férrea. el 5º Regimiento, que fue el alma de la resistencia de Madrid, fue organizado por el Partido, muchos militares profesionales se afiliaron al PCE en esa época porque veían que nos tomábamos la guerra en serio y que donde había comunistas había seriedad y disciplina.

Aparte de la falta de medios tambien hay que decir que la República fue muy traicionada desde fuera y desde dentro. Por ejemplo, en Euskadi, Menchaca, que estuvo en la marina de guerra de Euskadi, solía advertir sobre algunos que estaban con nosotros que en realidad eran falangistas, no le hacían caso los del Gobierno Vasco pero luego se demostró que no estaba equivocado. Respecto al papel que jugó el PNV durante la guerra, hay también mucho que hablar, entregaban los batallones a los fascistas, cuando entraron en Bilbao así lo hicieron, si nos llegamos a quedar allí igual nos fusilan a todos , se opusieron a que se volaran las instalaciones de Altos Hornos y resultó así que aquella empresa que no había servido para fabricar material para la República sirvió luego para abastecer a Franco. A espaldas de Aguirre, que éste sí fue más leal, Ajuriaguerra pactó con los fascistas la rendición del PNV. Por otra parte estaba Manuel de Irujo, que en Guipúzcoa no hacía más que obstaculizar el trabajo de las milicias y hacía propaganda contra las fuerzas de izquierda ante los corresponsales de la prensa extranjera tildándonos de asesinos descontrolados y que menos mal que estaban los nacionalistas para frenar nuestros desmanes. Llegó a tener una enganchada con Asarta , dirigente comunista vasco, éste, en una reunión del consejo de defensa de Guipúzcoa le arrebató el fusil a un miliciano y encañonó a Irujo, pero no disparó. Y luego, la traición de Santoña, allí lo entregaron todo a los fascistas, pactando los jelkides con el enemigo traicionando así la causa republicana.

Por su parte, el EPK aportó toda su fuerza al ejército de Euskadi ,de hecho los batallones de choque eran casi todos comunistas, batallones como el Perezagua, el Leandro Carro, el Rosa Luxemburgo, el Carlos Marx, el UHP, el Larrañaga...todos eran nombres relacionados con la revolución, cada batallón lo componían 600 hombres.Los nacionalistas, en los libros de Historia, dicen que la mayoría de los batallones eran del PNV, pero hay una trampa: muchos de sus batallones estaban compuestos por 200 hombres, así aumentaban el número de batallones. Aparte de lo dicho, los batallones del PNV tampoco tuvieron un papel muy destacado en la mayoría de los combates, que conste todo esto.

Además de los del EPK estaban los de la JSU, la unificación de las juventudes socialistas y comunistas , ambas organizaciones habían decidido unificarse, bueno, con la oposición de Ramón Rubial, él estuvo siempre en contra de la unificación , era un anticomunista convencido, esto lo puedo asegurar, que lo conocí en la cárcel.

También he de comentar la actuación de Astigarrabía , este camarada estuvo como ahora Madrazo, se metió con el Gobierno Vasco, se atrincheró bien comido y bien vestido y empezó a seguir la política del PNV en vez de la del PCE, pero en aquellos tiempos la cosa era diferente, le echaron mano y le expulsaron del Partido.

Volviendo al relato de mi vida, tras la Batalla del Ebro fui capturado al lado del río fluviá, estábamos en un nido de ametralladora y vimos pasar una tropa con caballos, mulos...etc, pensamos que serían de los nuestros y no hicimos nada, en esto nos echaron el alto diciendo que eran tropas de Franco, nos quedamos sorprendidos. En esto se acercó rápidamente un teniente, que ya había sido capturado en otra ocasión y se las sabía todas, y nos dijo que tiráramos rápidamente nuestra documentación, claro, yo llevaba el carnet de la JSU, era comprometedor, porque no era igual el que era sólo un recluta que el que tenía filiación política. Se nos acercó un oficial de la 5ª de Navarra, Sanchez Bautista, el que más ciudades tomó y nos preguntó que de donde éramos, yo dije que de Ortuella, me preguntó si conocía a unas chicas de allí cuyos nombres me dio, le respondí que habían ido conmigo a la escuela, entonces me dijo que les iba a mandar una tarjeta para que avisaran a mi familia que yo vivía ¡menuda alegría!. Luego , cuando nos llevaban, vimos a muchos de nuestros compañeros tendidos sin vida por el suelo, no sé si los habían fusilado o murieron en combate, porque sus cuerpos estaban dispersos por el terreno.
Estuve un tiempo en un campo de concentración en Reus, luego me soltaron y volví a casa. Al poco, estando por entonces trabajando como campesino en la llanada de Alava me llamó mi padre por teléfono que habían dado aviso para que fuera a hacer la mili, me sorprendió porque no me lo esperaba, lo cierto es que con 14 años me había inscrito para hacer la mili en la marina , pero con la guerra y todo eso se me había olvidado. El caso es que hice la mili en El Ferrol, en aquellos duros tiempos (año 1941) empezamos ya a reorganizarnos , en Europa estaba la guerra mundial, nos juntábamos compañeros que éramos de la misma tierra y comentábamos que en caso de que España entrara en la guerra debíamos apoderarnos del puente de mando y dirigir el barco hasta Inglaterra , no lo pudimos hacer porque España no entró en la contienda.

Una vez ya licenciado me casé y a los pocos meses vino a Bilbao un comisario del Partido, había pasado la frontera clandestinamente con otro de Ortuella y venía a organizar maquis, era el comandante que habíamos tenido en nuestro batallón durante la guerra, yo no lo reconocí en el momento porque venía disfrazado, fue luego cuando un compañero me lo reveló al finalizar la reunión. A partir de entonces tomé contacto con él y con otros compañeros de la zona, había que actuar con cuidado porque la cosa era muy seria, ya había armas por medio, había que ir siempre con la pistola encima.

El maquis de Euskadi era de monte y ciudad, concretamente mi grupo éramos de ciudad, otros amigos y camaradas míos estaban en el monte, pero actuaban en la zona de Santander, porque los montes vascos no son aptos para la guerra de guerrillas, aquí si te cortan las carreteras ya no te mueves, así que el maquis que actuaba en Euskadi era sobre todo urbano, que es más arriesgado. Hicimos un golpe económico en Zorroza , a ése no fui , yo fui a otros dos, en éste, al entrar en el banco, los compañeros dieron un mitin: "Somos guerrilleros de la República...etc" dijeron a los del banco que no dieran parte del golpe hasta pasadas dos horas, pero se conoce que sí lo dieron porque al poco llegó ya la guardia civil, yo debía estar en un sitio determinado para recoger el dinero por si acaso ellos caían presos o abatidos, cuando me dirigía al punto indicado, ví pasar a los camiones de la Guardia Civil, por lo que intuí que ya se había dado el golpe. Ellos huyeron primero a pie mezclándose entre la gente y luego cogiendo el tranvía hasta Bilbao y de allí hasta Santander, allí les esperaba un guerrillero para contactar con un grupo del maquis de aquella zona. Mis compañeros, al ser yo el único que estaba casado y con una hija, me dijeron que no participaría directamente en el golpe, me buscaron una coartada, a la hora del golpe debía yo estar en el médico para que no se me relacionara con nada, estaba en principio todo bien estudiado, pero a pesar de ello cayeron todos y en los interrogatorios salió al final mi nombre así que fui detenido , me echaron 12 años que luego me rebajaron a 6. Estuve en el peor penal , el Coto de Gijón , allí, si no es por la ayuda que tuve no sé si hubiera salido. Tras cuatro años y medio me dieron la condicional.

Ya en el año 1959, cuando se preparó la Huelga General política volví a caer preso, por entonces, nuestra estrategia había cambiado, habíamos abandonado la lucha armada, porque no daba resultados y estaban acabando con todos los maquis, así que comenzamos a utilizar la lucha pacífica de masas. Entonces yo tiraba propaganda antifranquista ayudado por mi mujer y mi hija.

Caí un 12 de Julio, la huelga iba a ser el día 20, me cogieron por "culpa" de un novato, yo ya era un veterano y tenía a este novato como contacto para dejarle la propaganda. Este compañero como es natural, no sabía dónde vivía yo, de hecho solía preocuparme de que supiera de mí lo menos posible, a veces acudía yo a las citas en tren y otras en autobús. El caso es que le arrestaron en Barakaldo y después de darle una buena paliza, lo soltaron obligándole a volver a contactar conmigo con un señuelo: él debía preguntarme al encontrarnos :"oye Nino, ¿Sigues en la Enquinesa?" esa era la señal para reconocerme. Me detuvieron cuando acudía yo a una cita en el parque de Bilbao, al llegar al lugar acordado se me acercaron unos policías gritando"¡Arriba las manos!" y yo, para que la gente no creyera que era un vulgar delincuente, empezé a gritar que era un comunista, eso les jodió mucho y se avalanzaron sobre mí para taparme la boca y meterme en un Jeep.

Ya en el cuartel de la Guardia Civil de la Salve me dí cuenta de que ya sabían quien era yo, que había estado en la guerrilla y todo eso. Me pegaron bastante, me esposaron y me pegaban en las esposas para que me cortaran las muñecas pero yo no hablaba, así que amenazaron con bajarme al sótano y colgarme, les dije que me daba igual, que no sabía nada. Cuando ya me bajaban apareció en la puerta un teniente gritando con muy mala leche a sus subalternos que me dejaran ya en paz y me trasladaran inmediatamente a Prisión , eso fue lo que me salvó.

En la cárcel estuve con el novato que me había delatado pero ¿qué le iba a hacer? ¡Si era un novato! En la lucha las cosas son así, si caes, caes. Él me contó cómo le habían obligado y todos somos humanos, en la cárcel solía compartir con él la comida que me enviaba la familia, si me hubiera puesto duro con el pobre hombre, igual se suicida.

Y desde ahí hasta la fecha de la legalización del PCE , recuerdo que cuando me enteré de la noticia lloré, recordé entonces a todos los que habían caído en la lucha. Ahora, algunas veces me pregunta algún joven si no creo que después de todo a cosa ha sido en vano, de hecho, ahora gobiernan este país los herederos de Franco pero ahora por la vía de las urnas y con mayoría absoluta. No , no ha sido en vano, los jóvenes tendrían que hacerse una idea de lo que era el Franquismo, una dictadura totalitaria y férrea en la que te podían pegar cuatro tiros sólo por pensar diferente. Uno está satisfecho de que los nietos más o menos puedan decir que son comunistas y hacer su propaganda sin los problemas que tuvimos nosotros. Me alegra mucho ver a los jóvenes ahora acudiendo a las manifestaciones antiglobalización, cada vez va más gente y lo mejor es que van aprendiendo, las manifestaciones son masivas y pacíficas, eso es importante, yo siempre aviso a nuestros jóvenes que se guarden de los violentos , suelen ser casi siempre provocadores de la propia policía para desacreditar el movimiento y para justificar la represión, no es nuevo, durante las manifestaciones que hacíamos en la Transición solían actuar mucho para provocar actos de violencia que justificaran cargas policiales y detenciones , luego solíamos ver a los provocadores hablando con la policía, el Poder suele utilizar esos métodos. Ahora se ve a muchos jóvenes que salen a la calle con banderas republicanas y comunistas en las luchas contra las leyes de la enseñanza, las luchas contra la globalización...no, no estamos aún acabados.
Así es nuestro Nino, como muchos otros de nuestros veteranos, un imprescindible.